Las uniones, aunque sean permanentes, entre homosexuales no conforman un matrimonio según el orden natural. Esto excluye la posibilidad de calificar como matrimonio. La cita suena arcaica, aunque es contemporánea. Estos fragmentos son algunos de los textos del abogado Gregorio Badeni, quien enseña en la cátedra de Derecho Constitucional de la Universidad Nacional de Buenos Aires.
El esnobismo que inspira la legalización matrimonial de personas del mismo sexo puede alterar la esencia natural del matrimonio y hasta de la propia familia. Si permitimos contraer matrimonio a personas del mismo sexo para evitar una presunta discriminación ¿Por qué no hacer lo mismo con la poligamia, con el matrimonio entre hermanos, padres o madres con sus propios hijos o hijas y otros casos que lindan con el absurdo, sostiene Badeni, quien es Profesor Titular de Derecho Constitucional en la Facultad de Derecho y Profesor Emérito de la UBA.
Los escritos de Badeni contraponen la Ley 26.618 del Código Civil que fue sancionado y promulgada en julio de 2010. Sus afirmaciones, volcados a textos de estudio analizan a la unión civil entre dos personas como si fuera un mandato divino. Quien enseña que el matrimonio entre homosexuales es «antinatural», fue declarado Personalidad destacada de las Ciencias Jurídicas por la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires en junio de este año, gracias al proyecto presentado por la legisladora del Pro Carolina Estebarena.
El autor de las precámbricas afirmaciones también brinda asesoramiento jurídico a la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) hace más de 25 años, es parte de la Academia Nacional de Periodismo y en reiteradas ocasiones es la mirada elegida por el Grupo Clarín para opinar sobre determinados aspectos legales. Badeni también es firmante en la exigencia de la Asociación de de Abogados por la Justicia y la Concordia, para el trato igualitario a los juicios de lesa humanidad.