Cecilio Saettone, el primo policía de la mujer del portero Jorge Mangeri, fue procesado por el encubrimiento del crimen de Ángeles Rawson y por falso testimonio, acusado de haber ayudado al condenado por el femicidio antes de que fuera detenido y de haber mentido en la instrucción y en el juicio oral, informaron hoy fuentes judiciales.
El suboficial mayor, que según fuentes policiales se retiró hace tres meses de la policía bonaerense, fue procesado por la jueza de instrucción número 8, Yamile Bernan, en el marco de una causa paralela que se abrió en el caso Ángeles a partir de su declaración en la instrucción y en el juicio oral.
El procesamiento es sin prisión preventiva, por lo que el policía retirado continuará el proceso en libertad.
Saettone fue procesado por los delitos de encubrimiento doblemente calificado por haber sido cometido por un funcionario publico y por tratarse de un delito precedente especialmente grave en concurso ideal con falso testimonio reiterado en dos oportunidades,
Ya en el juicio realizado el año pasado, los fiscales Fernando Fiszer y Sandro Abraldes habían pedido la detención de Saettone cuando fue a declarar en la audiencia del 6 de marzo del año pasado, aunque los jueces Tribunal Oral Criminal (TOC) 8 lo rechazaron.
Sin embargo, los mismos fiscales, el 11 el abril del año pasado pidieron que Saettone sea indagado por los mismos delitos por los que ahora fue procesado.
Según la acusación fiscal, Saettone asesoró y colaboró con el portero deshaciéndose de un morral de Ángeles y ayudándolo a enmascarar las heridas que la chica le hizo a Mangeri en un intento de defensa.
El suboficial se transformó en un testigo clave cuando durante la instrucción se presentó a declarar espontáneamente en el Juzgado de Instrucción 17 y le contó al juez Javier Ríos que el viernes 14 de junio de 2013, horas antes de quedar preso, Mangeri lo llamó para encontrarse con él porque tenía un problema y le preguntó qué haría si él tuviera algo que ver en el crimen de Ángeles.
En instrucción y en el juicio oral, Saettone contó que Mangeri le preguntó qué haría si él tuviera algo que ver con el crimen de Ángeles, y que él lo contestó te meto preso, pero que luego el marido de su prima le negó cualquier vinculación y dijo que estaba amenazado.
Los fiscales nunca creyeron la versión de Saettone y sostuvieron en su pedido de indagatoria que el policía supo que Mangeri había asesinado a Ángeles desde la noche del día del crimen y que la verdadera finalidad de aquel encuentro del viernes fue que el portero tenía «la necesidad de recibir más y mejores consejos».