El músico Cristian Álvarez quedó procesado con prisión preventiva por homicidio agravado por el uso de arma de fuego. El cargo que enfrenta prevé una pena de diez a 25 años.
El juez Martín Yadarola dictó el procesamiento del músico Cristian «Pity» Álvarez, acusado de asesinar a Cristian Díaz, de 36 años, en el barrio de Villa Lugano. El magistrado formalizó además su prisión preventiva y ordenó que se arbitren los medios necesarios para poner a su disposición tratamientos terapéuticos, brindándole «la asistencia integral al consumo problemático de sustancias psicoactivas en el que se encuentra inmerso».
El magistrado realizó un exhaustivo análisis de las condiciones del crimen, de los antecedentes del cantante y de los exámenes médicos a los cuales fue sometido para descartar la inimputabilidad.
El músico, quien fue líder de los grupos de rock Viejas Locas e Intoxicados, confesó ser el autor del homicidio de un vecino: «Yo lo maté, era él o yo», dijo antes de entregarse el viernes pasado a la policía.
«Sí, yo fui el que disparó y no vengo a declarar, vengo a decir lo que pasó», admitió la semana pasada al bajarse del auto de su ahora ex abogado, en medio de un tumulto de periodistas.
«Sí, lo maté porque era entre él o yo. Cualquier animal haría lo mismo», afirmó. «Él era un pibe que robaba No era tema de drogas. No éramos amigos», agregó. «Si no, me iba a matar él», respondió en una improvisada rueda de prensa en las puertas de la comisaría.