Están los testimonios. Están las capturas de los chats. Están las marcas en el cuerpo Hasta está el video de cómo la joven fue sacada en silla de ruedas, semi inconsciente, mientras su agresor era detenido en flagrancia. Pese a todos esos elementos, el acusado de drogar y violar a una joven venezolana quedó rápidamente en libertad. La bronca y la búsqueda de justicia se tradujeron en una concentración este jueves frente a su local para reclamar que esté preso.
La joven de 18 años fue convocada el sábado en Paso 693, en un local de venta de uniformes. Había visto un aviso de búsqueda laboral en Facebook dos días antes y el responsable del lugar la citó para comenzar a trabajar. Así lo hizo durante la mañana, hasta que pasado el mediodía el hombre cerró la persiana del local y le ofreció un vaso de agua. Casi de inmediato empezaron los mareos. Mientras sentía que se desvanecía, la joven migrante llegó a avisar a su mamá y su hermana.
Lo siguiente que recuerda, según consta en la denuncia judicial, son los golpes de su mamá contra la persiana. La mujer llegó acompañada por efectivos de la Policía de la Ciudad, que tuvieron que forzar el ingreso. Encontraron a la víctima con el torso desnuda, semi desmayada sobre una escalera. El hombre fue detenido en el momento, pero liberado luego por orden de la jueza Karina Zucconi, del Juzgado Criminal y Correccional N°15 de la Ciudad.
La fiscal Silvana Russi ya apeló la decisión de excarcelar a Garzón Martínez en la causa 3075/2021, que recién el martes por la noche fue caratulada como “abuso sexual con acceso carnal”.
El abogado que representa a la joven venezolana y a su familia volvió a cuestionar la decisión de la jueza, al considerar que es necesario que este hombre sea detenido “por la gravedad del caso y porque pueden existir otras víctimas que aún no se animaron a denunciarlo”.
“Los estudios demostraron que existen lesiones compatibles con el acceso carnal, no nos queda duda que eso ocurrió”, dijo el letrado en una entrevista con radio La Red, tras lo cual consideró que “hay que preguntarle a la jueza los motivos por los que llegó a la decisión de liberarlo”.
“Entiendo que no tenía todos los elementos para decidir de otra manera, pero creo que no se midió lo que estaba pasando realmente”, explicó. Según el abogado, “es urgente que se revoque la excarcelación del imputado pero hay que ver si lo encuentran”.
Durante la investigación, el comerciante dio como domicilio “la casa de su hermana, en la calle Tandil, en Mataderos, pero luego se presentó a declarar la hermana ante la Justicia y dijo que él no vivía con ella, sino que vivía en el local. Creemos que tampoco está en el local, por eso sospechamos que no lo van a poder encontrar», dijo.
Según dijo Baqué a a medios de comunicación, «al parecer era como una especie de modus operandi de publicar en estos grupos de venezolanos y tenemos la información que hubo otras personas que asistieron a estas entrevistas a los que les ha propuesto salidas y otras cosas».
El letrado manifestó además su preocupación porque el presunto atacante está en libertad y conoce el domicilio de la víctima, como también datos personales y el teléfono de la madre. Y denunció que el agresor “intentó lavarla”: la joven «salió con una remera de él dada vuelta, el hombre intentó lavarla, son circunstancias que nos hacen pensar que no tiene que estar en libertad en este momento».