El teléfono celular y la computadora personal entregada por la familia de Marcelo Longhi, el exrugbier y presidente del Club Municipal de Vicente López (Vilo) asesinado el jueves último en Luján, comenzarán a ser peritados por especialistas en gestión tecnológica, informaron este martes fuentes judiciales. Se trata de un teléfono marca iPhone y de una notebook propiedad de Marcelo Longhi (57), que serán peritados por personal especializado en gestión tecnológica del Departamento Judicial de Mercedes.
Según detallaron las fuentes consultadas por Télam, el celular de Longhi fue hallado junto a su cuerpo en Luján, mientras que la computadora portátil fue entregada por la esposa a la fiscal del caso, Mariana Suárez. Acompañada por el abogado Alejandro Broitman, la mujer declaró este domingo como testigo y entregó una computadora que su marido utilizaba en su lugar de trabajo en el Club Municipal de Vicente López, del que era presidente. Si bien también poseía una computadora en su domicilio, la mujer indicó que “no la utilizaba mucho” y sostuvo que la que fue entregada “era la que usaba” diariamente.
En tanto, una fuente con acceso a la investigación explicó que a primera vista no se halló ningún llamado o mensaje relevante en el celular del exrugbier, aunque ahora hay que ver lo que se pudo haber eliminado. También se estableció que el teléfono celular no tenía activado el rastreo satelital, por lo que los investigadores aún desconocen los lugares donde en los que estuvo Longhi antes de ser asesinado. “Será un trabajo más artesanal en base a imágenes de cámaras de seguridad y de testimonios”, aseguró la fuente consultada, quien detalló que el lugar donde fue hallada la camioneta junto al cuerpo es una zona rural donde no hay cámaras.
Además de la fiscal Suárez, se encuentran abocados a la investigación la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) de Mercedes y la División Homicidios de la Policía de la Provincia de Buenos Aires. El exrugbier fue hallado asesinado el jueves miércoles último con un golpe en el rostro y el cuello quebrado dentro de una camioneta a unos 15 metros de la banquina de una ruta cercana al partido bonaerense de Luján. De acuerdo con la autopsia realizada por médicos forenses de la morgue de Chivilcoy, Longhi murió a causa de una maniobra que le provocó la quebradura del cuello y no presentaba heridas de arma de fuego ni de arma blanca.
Además, los forenses establecieron que la víctima tenía un golpe en el rostro producido probablemente por un puño y que la data de muerte sería entre las 14 y 16 horas del miércoles 12 de enero. «Creemos que participaron dos personas del crimen, una que tomó a la víctima por delante y otra que le quebró el cuello por detrás», comentó a Télam una fuente cercana a la investigación, quien al ser consultada sobre si los autores pudieron ser conocidos de Longhi dijo que por ahora «no se descarta ninguna hipótesis».
Sobre los últimos movimientos de la víctima, los pesquisas determinaron que cargó 5.000 pesos de nafta en una estación de servicios de Pilar y que luego pasó por el peaje de la autopista de ese partido, donde su camioneta Ford Ranger gris fue tomada por una cámara de seguridad en la que no se llega a advertir si iba solo o acompañado, agregaron los informantes. Los voceros detallaron que el hombre salió a las 13.35 de ese día de su campo ubicado en la localidad de Tomas Jofré y se dirigió a la zona de Navarro con 180.000 pesos, dinero con el cual tenía previsto comprar dos novillos y que no fue hallado en el rodado.
Cerca de las 18, el presidente del club Vilo fue encontrado asesinado en la caja de su Ford Ranger, detenida entre unos pastizales, a unos 15 metros de un camino rural que se cruza con la ruta provincial 47, en el acceso al paraje La Choza, en el límite entre Luján y General Las Heras, en el noroeste del Gran Buenos Aires. En principio, los pesquisas determinaron que adentro de la camioneta estaba el teléfono celular de la víctima, que se conectó por última vez a las 14.20 del miércoles, mientras que en proximidades del puente del arroyo La Choza, a un kilómetro del lugar del hallazgo de la camioneta, se detectaron huellas de arrastre. Por ese motivo, se sospecha que Longhi pudo haber sido víctima de un ataque en ese sitio y su cuerpo arrastrado hasta la caja de la camioneta que, luego fue trasladado un kilómetro hasta el lugar del hallazgo.