La Ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, aseguró que “el talco siempre se confunde con cocaína”, al justificar la detención por parte de la Gendarmería de un hombre de 42 años que viajaba desde Mendoza en un ómnibus con talco para pies para revenderlos como vendedor ambulante. El acusado, Ariel Maximiliano Acosta, pasó 21 días detenido en dos cárceles federales, pero la funcionaria se lavó las manos: “pero eso es por orden de la Justicia”, dijo. 

“No hay ninguna falla en la investigación. El talco siempre se confunde con cocaína. Y las Fuerzas de Seguridad avisaron que podía ser un falso positivo”, dijo Bullrich en declaraciones a FM La Patriada, mientras se encontraba en Casa Rosada. 

“Lamentablemente hasta que no se comprobó (el supuesto “falso positivo”) lo dejaron preso. Pero eso es por orden judicial”, concluyó.  

Bullrich había festejado la detención de Acosta con un posteo en la red social X (ex Twitter) con un juego de palabras: “Mucho talco, poco Eficient-E”, escribió para anunciar el 6 de octubre que la Gendarmería había detenido en Mendoza a un hombre con dos kilos de cocaína que había intentado esconder en envases de talco.

La ministra había dicho que el hombre había intentado burlar un operativo en un micro de larga distancia, pero que Gendarmería lo había descubierto. La realidad no se ajustaba a su relato: Acosta, oriundo de Mar del Plata, había viajado a Mendoza por trabajo pero no tuvo suerte y volvía a su casa cuando fue requisado por el Escuadrón 64 Mendoza en La Paz, al límite entre esa provincia y San Luis. Los gendarmes encontraron los 18 envases de talco.

Esa ficción montada desde el ministerio le costaron a este hombre de 42 años y sin antecedentes, 21 días en la Unidad 32 de Mendoza y en el penal federal de Cacheuta.

La semana pasada el juez Alberto Carelli dictó su sobreseimiento y lo liberó, luego de que los resultados finales de las muestras concluyeran que se trataba de talco.