Un vuelo de Aerolíneas Argentinas partió durante las primeras horas del jueves rumbo a Moscú para traer una nueva partida de vacunas Sputnik V contra el coronavirus. El vuelo AR1060 cubrirá la ruta de forma directa y permanecerá en Moscú alrededor de cuatro horas para realizar la estiba. El regreso al aeropuerto internacional de Ezeiza bajo el numero AR 1061 será el próximo viernes 19 de marzo aproximadamente las 15. En total, serán 40 horas de operación entre las 16 horas de vuelo hacia el aeropuerto moscovita de Sheremetievo, el proceso de carga y las casi 18 horas que insume el tramo Moscú-Buenos Aires.
Mañana 01:05 am parte un nuevo vuelo de @Aerolineas_AR a Moscú para traer el país más dosis de la vacuna Sputnik V. Es la séptima operación a Rusia para seguir dando la pelea contra el Covid 19. Una gran responsabilidad para todo el equipo de nuestra aerolínea de bandera. pic.twitter.com/yQessFzsNu
— Pablo Ceriani (@ceriani_pablo) March 17, 2021
Aerolíneas Argentinas inició sus vuelos a Moscú a fines de diciembre y en los dos primeros vuelos llegaron al país 600.000 dosis de Sputnik V, mientras que en el tercero llegaron 220.000 dosis. En el cuarto vuelo llegaron al país 400.000 nuevas dosis. El quinto viaje permitió trasladar 517.000 dosis. Por último, el sexto vuelo trajo al país desde Moscú 732.000 dosis, lo que completa hasta el momento 3.374.000 dosis de vacunas trasladadas por la aerolínea de bandera a la Argentina, si se agregan las 904.000 de Sinopharm provenientes de China.
La operatoria estará a cargo nuevamente de 10 tripulantes, entre pilotos y copilotos, a los que se suman técnicos de carga, de mantenimiento y tripulantes de cabina, totalizando 20 personas a bordo.
Todavía no hay fecha para el arribo de las tres millones de dosis acordadas con Sinopharm, pero la intención del gobierno nacional es fijar cuanto antes día y hora para el traslado de ese cargamento desde Beijing, lo que evitaría desacelerar el ritmo del operativo de vacunación.
Al concretarse ese envío, las dosis de Sinopharm disponibles en el país superarían a las de Sputnik V, de ahí la importancia de que en un plazo perentorio la ANMAT autorice su aplicación a mayores de 60 años, para cubrir a esos grupos de riesgo.
De momento, las dosis chinas seguirán siendo aplicadas a otros grupos prioritarios por fuera de esa franja etaria, es decir, docentes, fuerzas de seguridad y los trabajadores de la salud que aún reste inmunizar. Por el contrario, se prevé que en esta coyuntura el stock de vacunas rusas se reserve exclusivamente para la inoculación de adultos mayores.
La expectativa, por lo tanto, se centra en el cargamento chino, en una regularización de los despachos de Moscú y en la llegada de las vacunas de AstraZeneca coproducidas con México, esperadas para principios de abril, además de que la OMS fije una fecha precisa para las entregas de las dosis previstas por el mecanismo Covax, el fondo global de acceso a las vacunas.