“Si encontrar trabajo está difícil para cualquiera, imagínate para una persona trans: te reciben el currículum, lo guardan y eso queda en el olvido para siempre. No estamos pidiendo nada menos que posibilidades de vivir; una oportunidad para que las chicas trans salgan de la calle y para que los chicos trans dejen de matarse”.
Así resume Fabio Martínez las frustraciones y las expectativas detrás del reclamo que gran parte de la comunidad trans tucumana realizó esta mañana, cuando diferentes agrupaciones se reunieron frente a la puerta de Tribunales de la capital y expusieron la discriminación que enfrentan a la hora de buscar trabajo. Tras una concentración en la que hablaron varios referentes, el grupo presentó ante la Corte Suprema de Justicia un proyecto que contempla un cupo laboral trans en el Poder Judicial.
Claudina Rukone, de la agrupación Libertad y Orgullo Trans Organizado (LOTO), fue una de las gestoras de la iniciativa y también la primera en hablar frente a las personas reunidas en la plaza Irigoyen. “Queremos generar espacios genuinos de laburo”, dijo, tras plantear la exclusión a la que se ven sometidos.
Uno a uno, los referentes pusieron en palabras sus miedos e impotencias, pero también sus anhelos y sus banderas: “somos parte de la sociedad”, “pedimos una mejor calidad de vida”, “no queremos privilegios, sólo trabajar como el resto”, “necesitamos mayor acceso a la educación” y “basta de transfemicidios” fueron algunas de las frases que expresaron. Muchos también coincidieron en recordar a los compañeros que ya no están y en insistir en un reclamo de justicia por ellxs.
“Queremos que cada trans tenga las posibilidades de vivir como cualquier otra persona. Lo digo por cada chica trans que fue asesinada y por cada chico trans que se mató. Eso genera la sociedad al no darnos nuestros derechos. No se dignan a vernos. Merecemos poder ser quienes somos”, remarcó Martínez, quien habló en nombre de Todos juntos somos más y de la Biblioteca Ayelén.
Buena voluntad
Luego de estas manifestaciones, el grupo se dirigió a Tribunales junto con los abogados Gabriel Alabí y Augusto Moeykeyns. En ese momento se registraron algunos incidentes, cuando los guardias intentaron impedir el paso de los letrados argumentando que las agrupaciones no podían llevar banderas. Tras algunos forcejeos, lograron ingresar y presentar el pedido de cupo laboral trans.
“El proyecto fue presentado en la Superintendencia de la Corte Suprema de Justicia de la provincia. Como ya tiene un número de expediente, hemos redactado un pedido de audiencia pública con el presidente del cuerpo, Daniel Posse, para que conozca la realidad y las necesidades de las personas trans”, indicó Moeykeyns, que aclaró que no hay plazos previstos para esperar una respuesta. “Todo depende de la buena voluntad del Poder Judicial”.
La posibilidad de que personas trans accedan a un trabajo en el ámbito judicial es una de las iniciativas ideadas por las agrupaciones y forma parte de un plan mayor, que tiene como fin reflotar el debate por una ley de cupo laboral trans en la provincia. El año pasado, un proyecto de estas características llegó al recinto de la Legislatura pero su tratamiento fue cajoneado, por presiones políticas y de la Iglesia.