El jueves 24, en la Legislatura porteña, el FpV no obstaculizó la iniciativa oficial; votamos a favor de la ley para que los inquilinos dejen de pagar la comisión de sus alquileres. Es un pequeño avance. Y lo dejamos en claro en la sesión: luego de gobernar la Ciudad más de diez años, no puede ser que la única política pública en materia habitacional que materialice el oficialismo sea que «la comisión la pague el propietario».
En los últimos 15 años, la Ciudad pasó de tener un 70% de propietarios a la Emergencia Habitacional. Como respuesta, Mauricio Macri, entonces titular del Ejecutivo porteño, antes de la campaña presidencial 2015 lanzó el Programa Alquilar se puede.Con resultados tan desastrosos que después de seis meses sólo diez familias habían accedido al crédito. Fue un maquillaje de política habitacional en tiempos de campaña. Algo que repiten ahora.
Queremos discutir la Emergencia Habitacional, que afecta a cientos de miles de porteños; cuál es la política de vivienda oficial y cuál es el rol del Estado ante el negocio inmobiliario. La vivienda es un derecho social básico y es el Estado el que debe promover y garantizar el acceso al techo propio. Tenemos que diseñar una política habitacional que contemple, por ejemplo, a los que necesitan una ley de emergencia, que son desalojados una y otra vez; a los porteños que necesitan que se regule el mercado de alquileres de un modo transparente con la presencia del Estado, y al mismo tiempo se tenga en cuenta a aquellos que necesitan una línea de créditos para acceder a su primera vivienda.
Lo que esta semana votamos es sólo un avance, producto de la militancia de las organizaciones de inquilinos. Pero que quede claro: es inaceptable que el oficialismo hable de una política habitacional, luego de una década de gestión en la Ciudad, con un presupuesto de más de $ 190 mil millones, en la que hicieron poco y nada. «