«Hay entre 500 y 600 evacuados, la situación en la provincia es muy complicada, llevamos tres semanas de lluvias», aseguró el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz en declaraciones a Radio Con Vos y precisó que las precipitaciones «superaron los 400 milímetros».
El mandatario provincial informó que el temporal «inundó toda la zona rural» y que la asistencia está siendo dirigida a «las más de 70 localidades que fueron afectadas».
En ese sentido, el gobernador afirmó que se reunirá con el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, y los productores agropecuarios para coordinar la ayuda a los campos.
«El impacto que tiene el cambio climático es realmente serio, hay que estar preparado», advirtió Lifschitz, y se quejó de que «en los últimos años, los recursos de la obra pública no han sido repartidos de forma equitativa».
Las intensas lluvias caídas la zona sur de Santa Fe afectaron a ciudades como Arroyo Seco, ubicada a 30 kilómetros al sur de Rosario, que ya había sufrido una situación semejante a fin de año, pero también a otras localidades como Villa Gobernador Gálvez, Pueblo Esther y Chovet.
La Agencia de Seguridad Vial de Santa Fe informó que la autopista Rosario-Buenos Aires quedó habilitada ayer en sus dos carriles aunque advirtió que el tránsito seguía hoy lento debido a que en las banquinas todavía hay agua acumulada.
El ministro de Producción de la provincia, Luis Contigiani, advirtió en Ahora Es Cuando por FM Blue que hay más de un millón de hectáreas afectadas por las inundaciones y las pérdidas alcanzan «como mínimo» los 800 millones de dólares en siembra y tambos.
«La situación es muy delicada, tenemos pérdidas de un millón de hectáreas cosechadas», agregó Contigiani y señaló que «las construcciones de canales clandestinos afectan mucho, pero en esta ocasión la lluvia fue histórica».