La Legislatura porteña modificó el proyecto del oficialismo que obligaba a los conductores de motos que circulen en la Ciudad a llevar en su casco un autoadhesivo con el número de la patente del rodado, y acordaron una normativa que solamente exija que el acompañante porte un chaleco reflectario con el dominio impreso.
La decisión se dio durante una reunión de dos comisiones de la Legislatura, destinada a analizar el expediente del diputado del PRO Daniel Presti, que busca crear una normativa frente a los casos de robos cometidos por delincuentes a bordo de motos y que, a su vez, es resistida por trabajadores que usan este tipo de rodados para desarrollar su actividad laboral.
El proyecto original, presentado hace poco más de un mes, planteaba nuevos incisos al Código de Tránsito y Transporte determinando como obligatorio para los motociclistas llevar un calco adhesivo indeleble e inviolable», en el que figure el número de patente de la moto en el casco protector, tanto del conductor como del acompañante, cuando lo hubiere.
Asimismo, indicaba que en caso de trasladar un acompañante, éste debe llevar un chaleco reflectante que tenga impreso en la parte delantera y trasera el número de dominio.
Ambas reglamentaciones iban en consonancia con la modificación en el decreto reglamentario de la Ley Nacional de Tránsito anunciada por el Gobierno nacional en marzo pasado a fin de tener un mayor control de identificación de los motociclistas que utilizan esos vehículos para cometer delitos.
No obstante, el proyecto porteño recibió cuestionamientos de parte de agrupaciones de motociclistas y trabajadores de actividades vinculadas al uso del rodado, como los mensajeros, quienes concurrieron en varias oportunidades a la Legislatura a participar de encuentros previos con diputados por el tema.
Con una ruidosa protesta, los motociclistas se concentraron en las puertas del edificio legislativo para rechazar la medida porque, según aseguró Laura Moyado, vocera de los manifestantes, «este proyecto de ley no soluciona ni la seguridad vial ni la ciudadana».
Los diputados realizaron cambios a la primera redacción y anularon la obligatoriedad al uso del autoadhesivo sobre el casco con la patente identificatoria, y dejaron únicamente la reglamentación para que el acompañante lleve puesto el chaleco reflectario con el número de dominio a la vista.
Al respecto, Julio Acequi, uno de los trabajadores en mensajería que estuvo presente en la reunión de los diputados donde se confirmaron los cambios, mantuvo la crítica a la medida al indicar que «el chaleco perjudica porque se puede trabar con los espejos de los autos y además los chalecos no se van a ver porque pueden ser tapados con los bolsos que llevamos puestos».
En tanto, Presti defendió el proyecto en tratamiento y los cambios introducidos y aseguró que «no afecta ni vulnera derecho constitucional alguno».
Por su parte, los diputados de la oposición Claudio Palmeyro y Paula Penacca pidieron explicaciones en torno a un artículo de la ley que contempla el impedimento para los motociclistas de ir con un acompañante en determinadas zonas de la Ciudad que serían decididas por el área del Gobierno de la Ciudad que quede a cargo de la implementación de la medida.
«No queda claro cuáles serán los criterios que va a tener en cuenta la autoridad de aplicación para fijar esas zonas», manifestó Penacca.