“En la minería venimos de una larga etapa de falta de diálogo. Necesitamos ponderar datos y sobre eso generar una síntesis, visiones compartidas y debatir de cara a la comunidad. Queremos construir una minería al servicio del desarrollo económico y social de la Argentina”, dijo en las últimas horas el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, ante la puesta en funcionamiento de la Mesa Nacional sobre Minería Abierta a la Comunidad (MEMAC). Del primer encuentro participaron ministros, gobernadores y representantes de organizaciones sociales como Eco House y Jóvenes por el Clima. No estuvieron presentes, en cambio, referentes de asambleas ambientalistas y comunidades que llevan años dando batalla contra proyectos extractivistas en sus territorios. Desde esos espacios no tardó en gestarse una respuesta de rechazo colectivo a la flamante MEMAC.

Un comunicado firmado por múltiples asambleas y organizaciones de distintas provincias y que suma adhesiones de investigadores y militantes ambientalistas se puso en circulación este martes, en rechazo a lo que consideran una “maniobra” que no implica diálogo genuino, que no contempla la realidad de los territorios y que apela a una estrategia ya utilizada antes, sin éxito.

“Rechazamos la creación de la mesa porque es una nueva iniciativa del lobby minero. Nos preocupa. La única manera de imponer un sistema es extractivista es con la represión. No hay diálogo con nosotros y nosotras. No hay diálogo posible cuando nos reprimen, contaminan el agua, vuelan nuestras montañas. Por eso las asambleas ya hemos expresado nuestro profundo rechazo a estos modelos. Nos unimos con el pueblo de Andalgalá, con la gente de La Rioja, de Chubut, que hace 20 años que se vienen manifestando en contra de la megaminería. Queremos agua pura para los pueblos y decimos basta de saqueo”, expresó Elsa, una de las referentes de la Asamblea Popular por el Agua, de Mendoza, donde la defensa de la Ley 7722 en defensa del agua genera movilizaciones masivas.

Desde el Sur, el ambientalista e integrante de la Unión de Asambleas Ciudadanas de Chubut Pablo Lada señaló: “Hubo una respuesta inmediata porque se venía siguiendo con atención. Primero, cómo están actuando algunas organizaciones entre comillas ambientalistas. Ya vimos algunas posturas pro-extractivistas, pro-nucleares que realmente nos preocuparon. Esta Mesa, quienes venimos hace mucho tiempo en esto la hemos visto en muchas oportunidades. No es más que una maniobra de lavado de cara verde. Es muy clarito para nosotros que es así”.

Lada cuestionó, además, “la forma del llamado, cuasi obsceno. Porque lo que buscan es destrabar, no buscan ningún diálogo. Creo que generó una respuesta y una reacción del colectivo de asambleas que son las que están en el territorio. No estas ONG que participaron para legitimar una actividad que es rechazada ni más ni menos que por pueblos enteros. El caso de Chubut es paradigmático: acaba de ocurrir hace pocos meses y fue un levantamiento popular. Una suerte de rebelión popular histórica”. Lo dijo en relación a la pueblada que se alzó en diciembre último para repudiar la aprobación –entre gallos y medianoche- de una modificación de la Ley de Zonificación que abría la puerta a la megaminería. Fue la movilización la que torció ese destino.

Esta iniciativa “suena a tomada de pelo –definió Lada- Pero creo que lo más penoso es que estas organizaciones como Jóvenes por el Clima o Eco House no puede ser que sean tan ingenuas de caer en una maniobra tan evidente, tan burda. Algunas de estas ONG son financiadas por sectores extractivistas, por sectores del agronegocio, por petroleras. Había que poner un punto a esto. Y también pensar que se avale una actividad como la minería que se estima que aporta más o menos el 20% de los gases del efecto invernadero, que sea avalada por una organización que dice luchar por el clima es cuanto menos un absurdo. Me parece que es muy sano que se haya puesto un punto ahí. El contrapunto a estas maniobras de lavado verde es que estas organizaciones se hayan juntado y podido reaccionar rápidamente a esta maniobra publicitaria. Que es una más. En los 20 años que llevamos aquí hemos visto varias de este tipo, que van mutando. Y siempre están detrás las cámaras mineras y estos sectores, junto a los espacios que quieren habilitar esta actividad cueste lo que cueste. Incluso con violencia extrema, como hemos visto en Chubut, con represión. Todas estas asambleas que han reaccionado van a seguir resistiendo en los territorios y poniendo blanco sobre negro a esta maniobra”.

Desde el norte, Rosa Farías, miembro de la Asamblea El Algarrobo de Andalgalá, Catamarca, coincidió en que “la Mesa de Minería que se propuso ahora no es novedad. Ya se hizo en gobiernos anteriores, con otro nombre. Es una estrategia ya usada. Las asambleas, que yo sepa, ninguna fue consultada. Llevaron a jóvenes que no tienen la cuestión del trabajo en territorio. Y eso es importante, porque nosotros somos un territorio donde la minería ha hecho su tarea. Y nos hemos enterado recién esta mañana que comenzaba esta mesa”.

“En cuanto a que es una fuente de empleo local, pongo un ejemplo: lo del litio, que ahora es un boom en Catamarca. En este momento, para la construcción de la planta de tratamiento y el armado del proyecto, tiene mucha gente (contratada). Pero una vez que se pone en funcionamiento, habría cuatro empleos en una planta. El número que hablan de miles de empleos después baja a lo mínimo”, contrastó, en relación a uno de los puntos señalados como beneficiosos por los impulsores de proyectos extractivistas.

El documento difundido por asambleas y comunidades remarca que “el único y exclusivo objetivo de esta mesa es romper las resistencias territoriales y avanzar en las siete provincias de Argentina que limitan el uso de sustancias tóxicas y peligrosas en la actividad minera y que fueron obtenidas a través de verdaderos procesos participativos, democráticos, informados y populares. Porque sobre este punto es importante destacar que la historia del movimiento socioambiental en Argentina está plagada de participaciones populares en instancias institucionales y gubernamentales”. Y acusa que, desde la MEMAC, “pretenden desconocer que hay provincias enteras que han tenido un verdadero, pacífico y respetuoso debate social y que han rechazado democráticamente esta figura extrema del extractivismo. El debate ya se ha dado. En suma, repudiamos el falso diálogo con organizaciones que se definen como ‘ambientalistas’ mientras legitiman una actividad que destruye, contamina y saquea los territorios”.

El texto completo:

Desde Chubut, Río Negro, Jujuy, Entre Ríos, Santa Fe, Neuquén, Mendoza, Buenos Aires (prov), San Juan, La Rioja y Catamarca

3 de mayo de 2022

RECHAZAMOS EL NUEVO EMBATE DE LA MEGAMINERÍA SOBRE LOS TERRITORIOS

Preocupados vemos un nuevo embate del gobierno y las transnacionales mineras sobre los territorios. Con el eufemismo “Mesa Nacional sobre Minería Abierta a la Comunidad (Memac)”, el Ministerio de Desarrollo Productivo Nacional, junto a la Cámara de Empresarios Mineros (que reúne a las grandes transnacionales del sector), lanzaron una nueva iniciativa de lobby minero. Nos preocupa aunque no nos sorprende, ya que han intentado exactamente lo mismo en varias oportunidades desde que se instaló la gran minería en nuestro país en la década de los ´90.

El único y exclusivo objetivo de esta mesa es romper las resistencias territoriales y avanzar en las 7 provincias de Argentina que limitan el uso de sustancias tóxicas y peligrosas en la actividad minera y que fueron obtenidas a través de verdaderos procesos participativos, democráticos, informados y populares. Porque sobre este punto es importante destacar que la historia del movimiento socioambiental en Argentina está plagada de participaciones populares en instancias institucionales y gubernamentales. No rechazamos los diálogos y debates, por el contrario, los propiciamos y los protagonizamos. Dos décadas de historia así lo demuestran: hemos iniciado el procedimiento constitucional de iniciativa popular en la provincia de Chubut en dos oportunidades, un plebiscito en Esquel -Chubut, 2003- y otro en Loncopué -Neuquén, 2012- (los dos únicos que desde el poder se permitieron); hemos participado en infinidades de audiencias públicas gubernamentales en la provincia de Mendoza y en todo el país, en el debate parlamentario de la Ley Nacional de Glaciares (que violan impunemente la gran mayoría de las empresas), ampliamente en cada una de las leyes que prohíben en 7 provincias el uso de sustancias tóxicas en la actividad, en la creación de ordenanzas municipales en Catamarca, en la publicación de libros de investigación y de divulgación sobre los mitos de la actividad minera, en foros públicos en las Universidades Nacionales de San Juan, Córdoba, Buenos Aires, Rio Negro, Mendoza, entre muchas otras actividades más. En suma, hemos participado en debates de todo tipo, en las calles, en las escuelas, en las universidades, en los poderes legislativos, ejecutivos y judiciales. Nos informamos científicamente y también porque conocemos nuestros ríos, nuestra tierra y porque sufrimos en nuestros cuerpos y vida esta actividad. Lo que rechazamos son las falsas mesas de “diálogo” que tienen un objetivo prefijado (“destrabar la actividad”, es decir, avanzar con la megaminería) subestimando los saberes territoriales y populares. Pretenden invisibilizar más de 20 años de resistencia. “No entendieron”, “faltó conocimiento”, “información falsa”. Sí entendimos y sí tenemos mucha información y conocimiento real, concreto y situado.

Diálogo unilateral, falso, sin horizontalidad, sin interlocutores válidos, que parte de premisas falaces tales como que el problema es “la ignorancia de las comunidades”. Porque cuando el único territorio de las organizaciones, que participaron ayer como legitimadoras del encuentro, son los medios de comunicación y las redes sociales, se pierde la visión de los territorios. Así intentan bastardear 20 años de luchas territoriales contra la megaminería en Argentina. ¿Qué conflictos quieren “destrabar” si la supuesta participación es con organizaciones que no tienen contacto con las comunidades afectadas, que no nos representan, y no cuentan con legitimidad? Pretenden desconocer que hay provincias enteras que han tenido un verdadero, pacífico y respetuoso debate social y que han rechazado democráticamente esta figura extrema del extractivismo. El debate ya se ha dado. En suma, repudiamos el falso diálogo con organizaciones que se definen como “ambientalistas” mientras legitiman una actividad que destruye, contamina y saquea los territorios.

No es por falta de información o de información errónea que rechazamos a la gran minería, ni por falta de control; lo hacemos porque en todo el mundo se impone sin licencia social, con gran conflictividad y represión, con destrucción ambiental, con saqueo económico, con corrupción política y con persecuciones físicas y judiciales (ayer mismo llegaron citaciones judiciales a vecinos y vecinas de Andalgalá en Catamarca). Y es por eso que, con los ecos cercanos del “Mendozazo” y el “Chubutazo” seguiremos defendiendo nuestros territorios, nuestra agua, nuestra vida.

Firman: Asamblea Jáchal No Se Toca (San Juan). Confederación Mapuche del Neuquén (Neuquén). Asambleas de Comunidades de Chubut (UACCH). Asamblea Popular por el Agua (Gran Mendoza). Unión de Trabajadores de la Tierra (UTT). Espacio Asambleario Autónomo de Río Negro (Río Negro). Red Nacional de Acción Ecologista (Renace). Comunidad Mapuche-Tehuelche Meli Witral Mapu Kimun (Chubut). Asamblea El Algarrobo, Andalgalá (Catamarca). Asamblea Provincial Pucará (Catamarca). Fiambalá Despierta (Catamarca). APCA Allen (Rio Negro). Alicia Chalabe, comunidades indígenas de Salinas Grandes y laguna de Guayatayoc (Jujuy). Comunidades mapuche de Rio Negro en defensa del agua y el territorio: Amulen Che (Mencue), Ragiñ Plang Kura Mew (Blancura Centro), Pulan Lafken (Laguna Blanca), Newen Ñuke Mapu (Cañadon chileno, Tres Cerros, Anecón Chico, Canteras Comallo y Fitahuau), Ancalao (Ñorquinco) y Mariano Solo (Colan Conhue). Basta es Basta: Coordinadora por una Vida sin Agrotóxicos (Entre Ríos). Foro Ecologista de Paraná (Entre Ríos). Asamblea Riojana Capital. Organización Ecologista Piuke (Río Negro). Asamblea Tupungato por Agua Pura (Mendoza). Asamblea No a la Mina Esquel (Chubut). Asamblea en Defensa del Territorio Puerto Madryn (Chubut). Asamblea de vecinxs de Epuyen (Chubut). Organización Identidad Territorial Malalweche, Pueblo Mapuche (Mendoza). Asamblea por el Agua y los Bienes Comunes de Luján de Cuyo (Mendoza). Cátedra libre de Agricultura Salud y Alimentación UNPSJB (Chubut). Asamblea de Vecinos Rawson Playa (Chubut). Unión de Asambleas de Comunidades Trelew (UAC Trelew). Secretaría de Géneros y Diversidades de la CTA Autónoma (Chubut). Asamblea Vecinal de Puerto Pirámides (Chubut). Departamento de Géneros y Diversidades de ATE (Chubut). Trabajadorxs de Ciencia, Educación y Salud de Chubut -TraCES- (Chubut). Asamblea Vecinal de Puerto Pirámides (Chubut). CTA Autónoma Puerto Madryn (Chubut). Asamblea en Defensa de la Cuenca del Río Epuyén (Chubut). Comisión de Vecinxs por la Bajada de los Palitos, Comodoro Rivadavia (Chubut). Asamblea por el Agua de Godoy Cruz (Mendoza). Asamblea Permanente por los DD.HH. -APDH- Regional Esquel (Chubut). Sociedad Ecológica Regional de El Bolsón (Río Negro). Capibara: Naturaleza, Derecho y Sociedad (Santa Fe). Asamblea de Gaiman en defensa del Medioambiente (Chubut). Asamblea por el Árbol (Mendoza). Asamblea Maipucina por el Agua (Mendoza). Movimiento Antinuclear Zárate Campana (Buenos Aires). Asamblea Socioambiental por el Agua de Guaymallén (Mendoza). Vecinos Autoconvocados de San Carlos (Mendoza). Asamblea de Las Heras por el Agua Pura (Mendoza). Les Pibes San Carlos (Mendoza). Equipo de Ecología Política del Sur, IRES Conicet (Catamarca). Asamblea del Pueblo de General Alvear (Mendoza). Asamblea por el Agua de San Rafael (Mendoza). Las Pibas del Agua (Mendoza). Asamblea Ecos de Mar (prov de Buenos Aires). Autoconvocados por el agua de Tunuyán (Mendoza). Comunidad Colla Queyunp (Mendoza). Asamblea de Vecinos Autoconvocados de Uspallata (Mendoza). Asamblea socioambiental Zona Este (Mendoza). Multisectorial Paren de Fumigarnos (Santa Fe). Foro Santafesino por la Salud y el Ambiente (Santa Fe). Marcha Plurinacional de los Barbijos (Santa Fe).

Adhieren: Maristella Svampa (socióloga y escritora), Enrique Viale (abogado ambientalista), Soledad Barruti (escritora, periodista), Guillermo Folguera (biólogo, filósofo), Jorge Nahuel (Confederación Mapuche del Neuquén), Gabriela Cabezón Cámara (escritora), Pablo Bergel (sociólogo), Rafael Colombo (abogado ambientalista), Horacio Machado Araoz (politólogo), Consciente Colectivo, Claudia Aboaf (escritora), Dolores Reyes (escritora), Colectivo #Mirá, Marcos Filardi (abogado de DDHH y ambientalista), Marina Aizen (periodista).