El 2023 promete canalizar un nuevo movimiento de miles de estudiantes interesados en ingresar al sistema universitario. Y cada institución académica apela a las mejores formas de atraerlos. Así, año a año la oferta suma nuevas (y atractivas) carreras novedosas, raras u otras que llevan algunos años pero no son tan conocidas para el público masivo. Atraer a las nuevas generaciones, esa es la tarea.
La Universidad Nacional de Rafaela fue la primera en Argentina en apostar a la creación de una Licenciatura en Desarrollo de Videojuegos y Entretenimiento Digital en 2017. El último relevamiento del Observatorio de esa Casa de Altos Estudios reveló que en 2022, esta industria cuenta con unos 1500 trabajadores y que mueve unos 72 millones de dólares al año. Otras universidades públicas siguieron sus pasos como el flamante Centro Universitario de la Innovación de González Catán que abrió sus puertas a mediados del año pasado y ya incorporó la Tecnicatura en Producción de Videojuegos.
La Universidad Nacional de Lanús (UNLa) propone la Licenciatura en Enfermería, un sector de la salud siempre relegado en el mundo académico. Entre sus carreras de postgrado, figura las especializaciones en Educación con Orientación en Investigación Educativa, y en Tecnologías de Fabricación Digital, que tiene como objetivo actualizar y mejorar las capacidades de los profesionales que provengan de carreras de base tecnológica y proyectual, por ejemplo con la difusión de las tecnologías de código abierto y de las diferentes técnicas empleadas en la construcción, configuración y calibración de equipos de fabricación digital.
El próximo año, la UNLa también brindará la Especialización en Migración y Asilo desde una perspectiva de los Derechos Humanos, dirigida sobre todo a funcionarios públicos y miembros de organizaciones sociales o agencias internacionales, en convenio con el CELS y con la Oficina para el Cono Sur del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.
La UBA, en tanto, propone especializarse en Ciencias Climáticas o Meteorología (carrera con pleno empleo), o en Bibliotecología, un área en la que faltan especialistas. Se cursa en la Facultad de Filosofía y Letras y está íntimamente vinculada con las ciencias de la información, accesibilidad, mediación y facilitación de la información.
En la Universidad de San Martín (Unsam) la Licenciatura en Artes Escénicas atrae a estudiantes de todo el país e incluso del extranjero. Por ejemplo, tienen matriculados de Chile, donde las carreras son aranceladas. Posee tres ejes: Teatro de Títeres y Objetos; Danza, y la estrella: Artes Circenses, en un domo único en la región.
A través de la Licenciatura en Música Autóctona, Clásica y Popular en América y de la Maestría en Creación Musical, Nuevas Tecnologías y Artes Tradicionales, la Universidad Nacional de Tres de Febrero (Untref) pretende desde hace más de una década recuperar el legado musical de nuestro continente. Los alumnos construyen sus propios instrumentos con los que luego tocarán en la Orquesta de Instrumentos Autóctonos y Nuevas Tecnologías. Otra experiencia musical es la Tecnicatura en Luthería, de cinco años de duración. La dicta la Universidad Nacional de Tucumán. La única de su tipo en el país.
En la Universidad Nacional de Río Negro (UNRN) sobresale la Licenciatura en Agroecología. Se brinda en El Bolsón y es la única de este tipo en el país, con un enfoque centrado en los sistemas productivos (cultivos intensivos, agricultura familiar, ganadería de bajo impacto, producción orgánica) y los recursos naturales propios de la región (el turismo y los servicios asociados), pero siempre teniendo en cuenta el factor humano.
“Hoy vienen a nuestra universidad jóvenes de todas las regiones del país. Nuestra propuesta académica incluye carreras muy innovadoras y con un alto grado de experimentación y prácticas desde el primer día de la cursada”, describe a Tiempo el rector de la UNRN, Anselmo Torres. Agrega: “La Universidad Nacional de Río Negro aún es joven, sin embargo está altamente consolidada en la región Norpatagónica. En pocos años hemos logrado no solo que nuestros jóvenes no migren a otros centros urbanos del país para continuar con sus estudios superiores, sino que establecimos una estrecha relación con todas las organizaciones de nuestro territorio”.
Si se habla de Argentina y de futuro, sale al instante el sector energético. La UNRN lanzó este año la Diplomatura Universitaria sobre Cambio Climático, Transición Energética e Hidrógeno Verde. Tiene 35 alumnos, la mayoría de la comarca Viedma-Patagones, de Bahía Blanca y de Sierra Grande.
En pandemia, egresaron las primeras camadas de Ingeniería Mecánica y de Ingeniería Nuclear del Instituto Balseiro, que depende de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA) y la Universidad Nacional de Cuyo. La Universidad Nacional de la Patagonia Austral (UNPA) ofrece la Tecnicatura Universitaria en Energía, y la de Catamarca (UNCA) comenzó una acorde a estos tiempos: la Tecnicatura Universitaria de Salmuera de Litio.
Cannabis universitario
A partir de la nueva normativa que promueve el uso y la investigación del cannabis medicinal, varias universidades públicas empezaron a avanzar en el tema: la Universidad Nacional de San Luis propone la Diplomatura de Extensión en Cannabis Medicinal; la de Entre Ríos ofrece su Diplomatura en Cannabis desde una perspectiva de derechos humanos; la de Rosario aporta el postgrado en Abordaje Integral de la Planta de Cannabis para la Salud; la de Quilmes tiene el Posgrado en Cannabis, Regulación y Política de Drogas; y la Arturo Jauretche cuenta con la Diplomatura en Cannabis y sus usos medicinales. La mayoría se realiza junto a organizaciones de la sociedad civil y el Conicet.
