Vecinos de San Martín ocuparon este jueves las oficinas de Edenor en ese partido bonaerense, para exigir que se realicen obras de infraestructura eléctrica y en reclamo por la muerte de tres niños de 7, 5 y 3 años en el barrio El Libertador, luego de que se quemara la vivienda precaria en la que vivían tras tres días sin suministro eléctrico.
Con banderas que pedían justicia para Quimey, Lucas y Sofía, y que reclamaban “Ninguna familia sin luz”, un centenar de personas protestó ante las oficinas de la calle Ayacucho al 2800, ante lo cual acudieron efectivos de la Policía Bonaerense y la empresa decidió bajar las persianas de metal del local.
Luego de la fuerte tormenta que en la mañana del sábado anegó varias zonas del Área Metropolitana, en San Martín se inundaron los fondos de la villa La Carcova y el barrio Independencia, pero los cortes de luz fueron generalizados, particularmente en el barrio El Libertador. Allí, en la vivienda consumida por el fuego, forzados a alumbrarse con velas, fallecieron tres de los cinco hermanitos que vivían allí y que asistían a un merendero del Movimiento Popular La Dignidad-CTEP.
“Estos tres chicos perdieron la vida por la desidia del Estado y por la avaricia de empresas como Edenor, que se están llenando los bolsillos con el tarifazo”, dijo a Tiempo José Gazpio, referente de esa organización social en San Martín, que sostiene la consigna: “Ser pobre no es sólo una injusticia sino un peligro. Exigimos un plan de obras y conexión segura y permanente para todxs lxs vecinxs de nuestro distrito”.
La manifestación vecinal logró forzar la presencia de un gerente técnico regional y otro de legales de Edenor, que firmaron un acta en la que se comprometieron a impulsar un acuerdo de tres puntos: un resarcimiento a la familia de los chicos fallecidos, la constitución de una mesa eléctrica de emergencia en el distrito y la puesta a disposición del trabajo de las cooperativas de la zona para que las obras no se demoren.
“El lunes habíamos festejado en el merendero el cumpleaños de 7 de Quimey. No queremos ni una muerte evitable más en los barrios”, cerró Gazpio.