El abogado Ismael Jalil, representante de los dos jóvenes detenidos en Floresta por su presunta vinculación a la organización chiíta libanesa Hezbollah, anunció este viernes que presentará una denuncia «contra el Estado nacional, por la persecución» a la comunidad islámica «en función de su forma de pensar, origen, religión».
El letrado sostuvo que para impulsar los arrestos se cuestionó a los jóvenes Axel Ezequiel Abraham Salomon, de 25 años, y Kevin Gamal Abraham Salomon, de 23, por las visitas que realizaron al Líbano donde tienen familiares.
En ese sentido, argumentó: «Parece que ir a visitar familia al Líbano es un delito».
«¿Pero qué pasa si un ciudadano de origen italiano viaja a la tierra de sus ancestros? ¿Acaso no puede hacerlo? Esta es una hipótesis de conflicto investida por la cercanía de la cumbre del G-20. El Gobierno Argentino se comporta como un esclavo con látigo al servicio de los Estados Unidos”, apuntó Jalil.
En otro orden, el abogado aseguró que las armas incautadas a los imputados pertenecen a un abuelo de los jóvenes: “Están declaradas, nunca fueron retiradas de la casa donde fueron secuestradas y no están adulteradas”.
“Esta causa se originó por un denuncia presentada por la DAIA en enero de este año y se procede ahora, cuando quedan pocos días para el comienzo del G-20. Uno de mis defendidos, Gamal, viajó al Líbano e Irán, donde hizo estudios religiosos y tiene certificados de esos cursos en farsí e inglés. No tiene nada que ver con el terrorismo y las armas”, remarcó Jalil.
Y, por último, agregó: “Han desatado una persecución contra una comunidad, pero no nos van a doblegar porque vamos a limpiar el nombre de esta familia y seguiremos hasta que estos dos chicos estén de nuevo en las calles”.
La causa está a cargo del juez federal de Lomas de Zamora Alberto Santa Marina, y se informó que ambos jóvenes declararon y seguirán presos por el momento.
Ambos solicitaron la excarcelación, pero el beneficio fue rechazado por el juez y por el fiscal del caso, Guillermo Marijuán.