Tras una reunión con el Director Ejecutivo del Instituto Nacional de Servicios Sociales para Jubilados y Pensionados, Carlos Regazzoni, las entidades nacionales que nuclean a las farmacias de todo el país anunciaron que harán un cuarto intermedio en el corte de servicios a los afiliados al PAMI, a la espera de soluciones, ya que la situación crítica de la red de farmacias se mantiene. Y aseguraron que volverán a atender a los jubilados con los medicamentos de su propio stock.
En el encuentro, Regazzoni les confió que suscribió con el sector industrial una prórroga del contrato de prestación de los remedios, que vencía el 31 de diciembre. Ahora será hasta el 31 de enero de 2017. Volvimos a insistir con la imperiosa necesidad de incluir a nuestras instituciones en los contratos que de ahora en más pudiera suscribir el PAMI para la prestación de servicios farmacéuticos, fijando en los mismos condiciones que posibiliten la viabilidad económica y financiera de su atención por parte de nuestras farmacias, indicaron desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos y Bioquímicos de la Capital Federal, mostrándose confiados de que se llegue a una solución definitiva en esta mesa de diálogo con las autoridades nacionales.
El conflicto se desató la semana pasada, cuando las farmacias alertaron la posibilidad de una navidad sin medicamentos para los jubilados, por los atrasos en los pagos del PAMI, que este año se volvieron crónicos, y que llegan a una deuda cercana a los dos mil millones de pesos. Los medicamentos que se entregaron a los beneficiarios del PAMI durante los meses de septiembre, octubre y noviembre, ya fueron pagados con recursos de los profesionales, sin respaldo de nadie, ni los laboratorios, ni la Obra Social, agregó Rubén Sajem, presidente de la sección de Farmacéuticos del Colegio Oficial de la Ciudad de Buenos Aires. A muchísimas farmacias ya le están cortando las cuentas de sus droguerías y los dejan sin reposición de medicamentos para atender a sus pacientes, sean o no pacientes del PAMI. Ahora mismo los farmacéuticos argentinos sostienen la prestación de la obra social más importante del país con dinero de sus bolsillos. La Industria Farmacéutica, por cuestiones comerciales o de propio beneficio, paga tarde y de manera incompleta lo que le gira el Estado, acotó.
Tras el anuncio de los farmacéuticos de que iban a dejar de entregar medicamentos a los afiliados, Regazzoni declaró la semana pasada: «Estamos tratando de garantizar que los laboratorios y las farmacias se entiendan. Es un problema de negociación entre ellos pero no vamos a permitir que eso perjudique al jubilado».
María Isabel Reinoso, presidenta de la Confederación Farmacéutica Argentina (CoFa), explicó a Télam en qué consiste el circuito que permite brindar remedios a los jubilados: «La farmacia vende al jubilado el remedio cubierto al cien por ciento; en quince días promedio lo tiene que pagar a la droguería. En ese lapso, los laboratorios deberían entregar a las farmacias notas de créditos para que nosotros podamos pagar con eso en las droguerías, pero desde septiembre que no completan los pagos.
Lo que fuimos haciendo las farmacias es pagar con nuestros fondos a las droguerías, pero muchas ya no tienen ese dinero ni notas de crédito, por lo que algunas droguerías dejaron de entregar. Esto no sólo afecta a los afiliados al PAMI, sino a todas las personas porque las droguerías no reponen sólo los medicamentos de los jubilados sino todos», afirmó Reinoso. Y reclamó que las farmacias sean parte de la negociación entre PAMI y los laboratorios, en la cual el organismo estatal paga la cobertura del 100% de los medicamentos, porque, en definitiva, somos nosotros quienes le damos el servicio al jubilado».