En un duro comunicado, la organización vecinal Amigos del Lago de Palermo se pregunta si el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires fue cómplice, por su presunta inoperancia, en la instalación de un boliche bailable en una parte de un parque público.
Según indicaron los denunciantes, el Club de Gimnasia y Esgrima montó la infraestructura en su sede de San Martín, que pertenece al Área de Protección Histórica APH2 Parque 3 de Febrero y que fue oportunamente zonificado también como Urbanización Parque (UP).
Para los vecinos, este es el corolario de una situación que arrancó prácticamente desde la creación del Parque 3 de Febrero, allá por 1875. “Muchas de estas ocupaciones fueron «legalizadas» por el entonces intendente (Osvaldo) Cacciatore en 1978 cuando fraguó la «venta» de parte de sus tierras a los clubes ocupantes”.
De acuerdo a la minuciosa reconstrucción realizada sobre el devenir de estos terrenos, Los Amigos del Lago establecieron que nunca se cumplió con las “condiciones emanadas de esas «ventas», como los mínimos pagos y los grandes plazos otorgados. De todas maneras, los gobiernos de Facundo Suárez Lastra y Carlos Grosso “blanquearon y escrituraron esas ocupaciones”.
Como si fuera poco, se detectó que estos clubes avanzaron aún más sobre estas tierras, pero de una manera mucho más burda: corriendo los alambrados. “Esa fue la técnica usada por el Club de Gimnasia y Esgrima para usurpar casi cuatro hectáreas en la década de 1990: dos en su sección San Martín y otras dos en la denominada Jorge Newbery.
Además de ese corrimiento de alambrados, hasta el año 2012, GEBA usaba “libremente como parte de su Sector Equitación, en la Sede San Martín, la gran plaza denominada Parque Olímpico -delimitada por las avenidas Dorrego, Figueroa Acorta y la calle J. A. Noble- para ejercicios ecuestres de sus socios y práctica de polo”.
Estas irregularidades fueron denunciadas y judicializadas en su momento por Amigos del Lago de Palermo. A partir de esta iniciativa, en 1996 lograron la primera recuperación de parte del espacio y en 2005 alcanzaron un desalojo judicial de las hectáreas restantes. Luego, se erradicaron las actividades ecuestres sobre la zona del parque público.
Lejos de tomar nota del malestar vecinal, “vemos como, en 2022, el Club de Gimnasia y Esgrima vuelve a repetir hechos que creíamos superados: ha cedido parte de su ex Sector Equitación para la instalación de una gigantesca carpa que alberga un boliche bailable que, además, ocupa un importante sector de parque público que excede el terreno del club”, concluyeron los integrantes de la asociación, quienes consultaron sobre la problemática al personal de la discoteca y éstos respondieron que el boliche tiene contrato con el club para permanecer allí por tres años.