Tras varios días de incertidumbre, la firma Ocean Infinity resultó preadjudicada para buscar al Submarino ARA San Juan, desaparecido junto a 44 tripulantes en el Mar Argentino desde noviembre del 2017. La Comisión Evaluadora, compuesta por la Marina, especialistas y familiares, dictaminó que la empresa liderada por el norteamericano Oliver Plunkett busque el navío y sólo en caso de encontrarlo, se embolsará 7,5 millones de dólares.
La decisión se tomó meses después de que la propia Armada suspendiera la búsqueda y luego de las idas y vueltas del Ejecutivo con la designación de una empresa para tratar de ubicar los restos de la nave y su tripulación.
La Comisión Evaluadora eligió entre dos empresas: Ocean Infinity y SEA Sistemas Electrónicos Acuáticos, compañía del ítalo-venezolano Hugo Marino.
Según consta en el Dictamen de Evaluación de Ofertas, publicado en el portal Compr.ar, la oferta de SEA fue desestimada por «estar condicionada». La propuesta de Marino especificaba que iban a contar con un pago único de 7 millones de dólares antes de impuestos aplicables solamente con la certificación fehaciente del submarino ARA San Juan (S-42), además de pedir un cambio de tripulación luego de los treinta días de operaciones; impuestos de importaciones y exportaciones; impuestos fiscales y cualquier tipo de impuestos.
Marino se presentó en una Unión Transitoria de Empresas (UTE) junto a la canadiense Ccean Floor Geophysics. Según el dictamen, “se considera que ha incurrido en las Causales de Desestimación No subsanables”.
De no mediar ninguna sorpresa en las próximas 48 horas quedará firme la selección de la firma norteamericana.
En caso de quedar confirmados, los veedores seleccionados (cuatro de la Armada y tres familiares, uno de cada querella) viajarán en las próximas semanas rumbo a Ciudad del Cabo (Sudáfrica) para luego retornar al país con el convoy de barcos de la compañía. Se estima que en 30 días a partir del viernes comenzarán la búsqueda en las profundidades del Mar Argentino.
En su propuesta afirmaron que cuentan con varios AUV (Autonomous Underwater Vehicle, o submarino autónomo), y sobre todo aceptan el riesgo financiero que implica el sistema No Cure-No Pay. Sin embargo, la empresa de bandera estadounidense aclaró en su exposición que no cuenta con un sonar de apertura sintética (SAS).
Ocean Infinity cobró fama mundial cuando el gobierno de Malasia contrató a la firma para buscar el vuelo MH370 de Malaysia Airlines desaparecido en 2014 con 239 personas a bordo a cambio de 70 millones de dólares.