El 2 de enero de 1963 la ciudad de Santa Fe registró una temperatura de 45,4°. La más alta de su historia. Hasta ayer. Este miércoles, el Centro de Informaciones Meteorológicas (CIM) perteneciente a la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas de Santa Fe informó 46,1°. La ola de calor extremo no es sólo potestad del AMBA y no parece ser tampoco algo azaroso.
La hora del récord histórico fue las 14.41. Debieron pasar 59 años y 10 días para que la población santafesina transite los mayores calores de su historia. “Según nuestros registros de temperaturas, que arrancan en 1920, hasta la fecha la máxima fue en 1963 con 45,4°”, precisó el ingeniero Ignacio Cristina, docente investigador del CIM, según informó El Ciudadano de Rosario.
El siglo XXI viene marcando una tendencia a mayores calores y sequías. En los últimos 20 años, Santa Fe registró 45° en 2013 y 44° en 2008. Según el experto, la media máxima para los últimos 10 años está en torno a los 40° o 40,5°.
Según el investigador del Centro de Informaciones Meteorológicas, el pronóstico es coincidente con las estimaciones trimestrales del Servicio Meteorológico Nacional para este verano, que indican temperaturas superiores a la norma para el centro y sur de la provincia.
La ola de calor de esta semana puede llegar a ubicar a la Argentina como el lugar más cálido del planeta. Ante el fenómeno extremo, el gobierno anunció medidas y la conformación de una mesa interdisciplinaria que ataque la emergencia. La principal es que los servicios aguanten: en Rosario, por ejemplo, la jornada de ayer derivó en múltiples cortes de luz sobre todo en zona sur. El calor motivó otro récord: el del consumo de energía. Este miércoles a las 13.45 la ciudad alcanzó nuevo pico de 2.471 megavatios.
En El Litoral el calor y la sequía forman un combo explosivo para las cuencas de agua. Puede dar fe Jonatan Sandoval, que trabaja en Club Náutico Sur, en el predio de lo que fuera en algún momento el Ministerio de Obras Públicas, cerca del Magrullo, en la zona de Rosario. Ayer fue filmado por vecinos mientras caminaba en el medio del Río Paraná, en una escena casi bíblica. La bajante del río ya llegó a 49 centímetros por debajo del nivel cero.
Cambio Climático
El 2021 estuvo entre los 6 años más calurosos de la historia de Argentina. Hace un par de meses, el Servicio Meteorológico (SMN) presentó un reporte preliminar “El Clima en Argentina 2021” que dio cuenta de algunas certezas: la ola de calor no es un hecho aislado. Y es inevitable no asociarla a los efectos del cambio climático en nuestro país.
“La serie histórica de mediciones permite dar cuenta de las manifestaciones del cambio climático en nuestro país y dar sustento a las políticas nacionales de adaptación, respuesta y mitigación frente a los fenómenos asociados al cambio climático”, expresó el informe, y destacó que los registros de dióxido de carbono y metano muestran un incremento constante en el transcurso de los años: “Los registros de dióxido de carbono y metano muestran un incremento constante en el transcurso de los años”.
¿A cuánto está la Ciudad de Buenos Aires de su récord de temperatura?
El martes, CABA registró 41,1°. Y para hoy está anunciado entre 41 y 42°. Aún así, no alcanzaría su récord histórico, aunque está muy cerca. La máxima fue la marca inédita de 43,3°, el 29 de enero de 1957. Las de esta semana no están lejos, y de hecho constituyen ya el segundo registro más alto desde que se arrancó a medir sistemáticamente en 1906.
Según los datos del SMN, aquel día de 1957 se había iniciado con una mínima de 26,6°, para marcar alrededor de las 15 horas la máxima de temperatura real récord: 43,3°, que hacia el final del día descendió a 29°.
Aquella jornada -calificada por los principales diarios de la época como un «día inolvidable»- dejó a su paso un total de 11 víctimas mortales y alrededor de 100 personas que debieron ser atendidas por insolación y golpes de calor. Ahora, a diferencia de esos años, se agregó una medición peor: en aquel momento no existía la sensación térmica.