Agentes de la Policía Bonaerense reprimieron este lunes a varias personas que protestaban en las puertas de un jardín de infantes en San Fernando, cuya institución quedó en el ojo de la tormenta luego de que la semana pasada se denunciaran varios casos de abusos de niños. Los uniformados no dudaron en usar posta de goma contra los manifestantes.
Todo se inició hace unos días atrás cuando padres y madres de niños que asisten al Jardín de Infantes N° 934 acusaron a una maestra de proferirles maltratos y abusos a distintos chicos. Todo eso habría ocurrido mientras la directora hacía la vista gorda, minimizaba lo que estaba pasando o directamente participaba de los presuntos hechos.
El conflicto fue escalando y la indignación de los familiares también. Las denuncias quedaron radicadas en la Comisaría de la Mujer y la Familia; y si bien tanto la directora como la maestra sospechada fueron separadas de sus cargos por decisión del área de Inspección Distrital, que depende de la Dirección General de Cultura y Educación bonaerense, la furia de los manifestantes estalló cuando se enteraron que la directora estaba en el establecimiento mientras se realizaba la protesta.
Trascendió que la mujer estaba allí porque debía firmar la notificación de su apartamiento del cargo y retirar sus pertenencias. La mayor tensión se produjo cuando la directora era retirada del lugar protegida por un cordón policial. Instantes después, la Bonaerense reprimió a los manifestantes.
La abogada y militante por los Derechos Humanos, Claudia Cesaroni, criticó desde su Twitter la respuesta de la policía: “Yo no puedo creer que desde el área de Educación Inicial de la PBA no se pueda abordar una situación conflictiva en un jardín de infantes, sin que la policía empiece a los tiros”, se quejó.
