Un hombre fue asesinado y su hija resultó herida cuando festejaban el triunfo de Rosario Central, atacados a balazos por un vecino hincha de Newells Old Boys que no soportó las burlas.
El hecho se registró alrededor de las 17 del domingo en la Ghandi al 5800, del barrio Ludueña, ubicado en la zona norte de Rosario
Se trata de Omar Alcides Verón quien salió junto a su hija a la calle para festejar el triunfo del Canalla y, al pasar frente a la casa de un vecino, identificado como Walter Leiva, se inició una discusión por lo resultados del clásico rosarino. Leiva no soportó las burlas, sacó un arma y disparó contra Verón y su hija.
Ambas víctimas del episodio fueron trasladados al hospital Centenario, donde los médicos constataron que Omar Varón estaba muerto a raíz de una herida de bala en la zona del pulmón izquierdo, mientras que su hija solo presentaba una herida leve en el cuero cabelludo y fue dada de alta a la brevedad.
El atacante fue detenido y fue secuestrada una carabina, calibre 22, indicó hoy a la prensa el fiscal de la causa, Adrián Spelta.
Durante el clásico rosarino tampoco faltó la violencia. Otra vez la intolerancia ligada al fútbol, el fanatismo que se transforma en violencia.
La barra brava de Newell’s Old Boys desinfló y robó la lona de la manga para atacar a los jugadores de Rosario Central.
Diego Maio, coordinador de Seguridad en los Espectáculos Deportivos, informó que si no estaba la policía, hubiera sido un desastre. Se cometió un exceso, será la Justicia la que deba tomar cartas en el asunto, continuó el funcionario.