El jueves, tres mujeres del equipo de salud del Movimiento de los Trabajadores Excluidos (MTE) fueron amenazadas cuando cocinaban para una actividad con jubilados en su local – Larrazabal 2463, Fiorito: ingresaron dos policías uniformados y uno de civil intimidando a las trabajadoras, con preguntas y advirtiendo no poder realizar ollas populares. Además, amenazando con volver si las mismas continuaban.
El hecho sucedió en el marco de una serie de denuncias de persecución a movimientos sociales y gremiales que desarrollan actividades barriales, en este caso lo ocurrido en Fiorito, Lomas de Zamora.
Gisela Stablun, integrante de la Red de Profesionales de la Salud por el Derecho a Decidir y referente de Patria Grande, expresó: «Este accionar intimidatorio que pretende disciplinar y meter miedo a quienes nos organizamos contra el modelo de hambre y exclusión, es cada vez más sistemático», señaló y contó otro caso de persecución: «El martes la policía detuvo un colectivo de la Ciudad de Buenos Aires que trasladaba cartoneros de zona sur hacia CABA y los hicieron bajar a todos.»
Estos nuevos hechos se suman a otros que se dieron con un accionar similar, como fue el secuestro y agresión a la docente de Moreno que también realizaba una olla popular o la represión y detención policía en la Ciudad a trabajadores de la economía popular que terminó con Juan Grabois, Rafael Klejzer y Jaquelina Flores, acusados de «atentado y resistencia a la autoridad».