Miguel Etchecolatz, a días de haber sido exonerado de la Policía Bonaerense (figuraban como retirado y conservaba sus condiciones como policía), tuvo que dejar la cárcel de Ezeiza, donde cumple sus condenas a reclusión perpetua por crímenes de lesa humanidad.
La decisión de que el represor fuera trasladado a un centro asistencial la tomó el juez federal de Lomas de Zamora, Federico Villanueva, ante este ACV.
Etchecolatz, mano derecha de Ramón Camps y jefe de la Bonaerense durante la última dictadura, tiene seis condenas por crímenes de lesa humanidad -la primera de ellas dictada en 1986- y sigue siendo investigado en otros procesos. Es el principal sospechoso de ser el responsable de la desaparición de Jorge Julio Lopez
La primera de su condenas fue de 23 años de prisión en la denominada causa 44 o «Camps»; en 2004, tuvo la pena de 7 años de prisión (reducida luego a 4), por la apropiación de una hija de desaparecidos; en 2006, s ele dictó la reclusión perpetua en la conocida como «causa Etchecolatz»; en 2012, tuvo prisión perpetua por el «Circuito Camps»; en 2014, se le imputó perpetua por un doble homicidio en el marco de la causa «La Cacha», y en 2016, se lo penó con a 25 años de prisión por el secuestro y las torturas a una pareja desaparecida.
En los últimos días, su nombre volvió a aparecer en los medios luego de que el Ministerio de Seguridad, lo exonerara junto a otros 11 efectivos de la Policía de la provincia de Buenos Aires que participaron en la represión ilegal durante la última dictadura militar.