En los últimos meses, el ejecutivo porteño encabezado por Rodríguez Larreta, introdujo varios proyectos de Ley en la legislatura que tuvieron un tratamiento exprés. Pero la línea común que une a todos ellos no es solamente temporal, debido a su aprobación con pocos días de debate en comisiones, sino, que fueron merecedores de un fuerte rechazo de la sociedad. Entre ellos se destacan: la modificación del estatuto docente, que fue aprobado en menos de cinco semanas; La “Ley Farmacity” que luego de recibir firmas expeditivas de tres comisiones fue aprobada en 10 días; y ahora se sumará un nuevo récord, el polémico proyecto de Parque Lineal de Honorio Pueyrredón, que este jueves el oficialismo busca sancionar tras haber ingresado hace apenas 7 días.
Por esta razón, vecinas y vecinos de Caballito volvieron a movilizarse en Acoyte y Rivadavia, bajó la consigna «No voten contra Caballito». El objetivo fue exigirles a los legisladores del oficialismo que no voten la ley que avalará la obra. La manifestación comenzó pasadas las 18:30 con la presencia de residentes locales que se acercaron a repudiar este nuevo avance del oficialismo local. “Hay que terminar con esta escribanía. Este proyecto de Larreta ingresó el 5 de julio y fue redactado el día anterior, mientras estábamos en la audiencia pública rechazando el Parque Lineal”, señala a Tiempo Gustavo Trochinsky, vecino del barrio e integrante de la agrupación SOS Caballito.
El proyecto eludió varias comisiones por las que tenía que haber transitado, y el viernes de la semana pasada recibió las firmas en la de Transporte. “Fuimos un montón de vecinos ese viernes a rechazar el proyecto. El documento lo presentaron solo en la comisión de Transporte, y tendría que haber pasado por la Comisión de Medio Ambiente y Espacio Público además que debe tener doble lectura, es decir, luego de la primera aprobación viene otra audiencia pública y tiene que pasar nuevamente por el parlamento. El PRO quiere aprobar este jueves un proyecto que ingresó hace una semana para evitar un debate serio”, agrega Trochinsky.
Mientras caía la tarde, se sumaban más vecinos y vecinas a la movilización, al grito de “Larreta, no queremos más negocios en nuestro barrio”. Este nuevo proyecto de Ley plantea que Honorio Pueyrredón se transforme en una «calle de convivencia», entre Neuquén y Gaona, y convertir todo ese tramo en una peatonal. La intención del gobierno municipal es instalar allí un «corredor verde» a partir de la restricción de la circulación de vehículos, lo cual fue cuestionado por quienes viven en la zona al considerar que la iniciativa impactará negativamente en el tráfico y generará colapso en las diferentes arterias.
“Cada cosa que presenta Larreta en la legislatura es un negocio para él y sus amigos, no queremos que siga avanzando esta obra. Ni siquiera se pusieron a pensar que si hay niños jugando en el Parque Lineal, van a transitar muchos autos en la calle de convivencia, entonces lo que debería ser un lugar seguro para el disfrute se transforma en una tragedia”, adhiere mientras se manifiesta Oscar Sánchez, un vecino que se sumó por primera vez este jueves a la marcha.
Cabe recordar que varios vecinos presentaron un amparo judicial con fallo favorable y lograron frenar las obras al determinar una serie de incumplimientos en la etapa de instancias previas, como el cambio de normativa urbana respecto del uso que tiene la avenida.
“Esta calle de convivencia va a correr en paralelo al actual cordón de la avenida Honorio Pueyrredón y va a partir al medio a este Paruqe Lineal. La idea es que permita el ingreso a las cocheras de los edificios y que eventualmente puedan ingresar ambuelancias, por ejemplo”, cuenta a este medio Stella Johnson, integrante de Consejo Consultivo de Caballito. Para la referente barrial esta calle de convivencia no mejora la situación, sino que trae muchos otros peoblemas. “Ante un siniestro si ingresa un camión de bomberos no habrá lugar para el ingreso de ambulancias, y viceversa. Estas son situaciones que ni siquiera fueron tenidas en cuenta por el gobierno de la Ciudad”, termina Johnson.
Los números en la legislatura y la decisión judicial
Más allá que la justicia aún no se expidió sobre la situación de fondo, quienes se oponen Parque Lineal apuntan a los legisladores que pertenecen a los partidos de la coalición oficialista. Sostienen que con su voto negativo, podrían frenar esta obra que requiere de al menos 31 votos positivos, cifra a la cual el bloque de Vamos Juntos y los aliados de la UCR y el Socialismo superan ya que cuentan con 32 bancas.
“A los legisladores radicales, de la Coalición Cívica, el Partido Socialista y Republicanos Unidos les decimos que deben escuchar a quienes vivimos en Caballito y no ser solo unos votos cantados de cualquier proyecto que presente el oficialismo”, exclama Adrián Hernández, vecino del barrio. “El gobierno porteño nuevamente va por una ilegalidad porque transformar Honorio en un supuesto parque, implica cambiar el uso y eso se hace con otro tipo de ley que requiere doble aprobación y una audiencia pública en la Legislatura”, agrega Hernández y termina: “Es por eso que denunciamos a los legisladores aliados al PRO de ser responsables de la destrucción del barrio si votan a favor del proyecto de Larreta”.