El Instituto Nacional de la Yerba Mate (INYM) concretó la donación de 128.000 saquitos de mate cocido, destinado a los habitantes de Ucrania que debieron huir de la guerra con Rusia y se encuentran refugiados en Polonia.
El vicepresidente del INYM, Ricardo Maciel, señaló que «el pedido surgió de parte de los referentes de la comunidad ucraniana en la provincia de Misiones y el Directorio rápidamente aprobó esta ayuda humanitaria».
Maciel, quien estuvo presente en la partida del embarque junto con el director por Sector Cooperativo, Denis Bochert, explicó que «la carga está compuesta por saquitos de mate cocido envasados bajo la marca Yerba Mate Argentina, y son los mismos que emplea el INYM en sus actividades promocionales».
El cargamento partió por vía terrestre hacia Buenos Aires y allí será embarcado en el avión del Comandante Enrique Piñeyro, quien se ofreció para llevar la mercadería a su destino final.
En la gestión de esta acción solidaria intervinieron activamente la embajadora de la Argentina en Ucrania, Elena Leticia Mikusiski; el director del Departamento Económico y Comercial de la Embajada de Ucrania en la República Argentina, Vitalii Odovik, y la subgerente de Promoción y Desarrollo del INYM, María Marta Oria.
Como ocurre con todos los envíos de ayuda humanitaria, la coordinación general se encuentra a cargo de Fabián Ballesteros, secretario de la Comisión Cascos Blancos, dependiente del Ministerio de Relaciones Exteriores, Comercio Internacional y Culto.
«Queremos agradecer el gesto del INYM porque es algo muy importante para la gente que está en Ucrania, donde lamentablemente sigue la guerra», destacó Diego Muruniak, cónsul de Ucrania en Misiones.
En el mismo sentido se expresó el presidente de la Delegación Misiones de la Representación Central de Ucranios en Argentina, Jorge Balanda, quien subrayó la destacada participación de los miembros de esa colectividad en la actividad yerbatera.
«Esta acción tiene un significado muy especial, ya que la gran mayoría de los inmigrantes que llegaron a Misiones se dedicaron a la yerba mate, que fue el sostén de su desarrollo y crecimiento», recordó, para luego remarcar que «este producto seguramente pasó por manos de descendientes ucranios, quienes hoy están dando una gran mano solidaria».