La última reunión paritaria se realizó el 10 de marzo. Allí el gobierno de la Ciudad insistió en su propuesta del aumento del 18% en dos cuotas más un 1,75% a partir de agosto en forma de bonos y cifras en negro. La totalidad de los gremios rechazaron la propuesta y la mesa no fue convocada nuevamente por el ejecutivo a pesar del pedido formal suscripto por los gremios.
Así las cosas, el ejecutivo resolvió que a partir de este mes depositaría en forma unilateral los salarios de los docentes porteños en función de lo que establece su propia propuesta de aumentos que comienza con una cuota del 10%.
Amanda Martín, secretaria Adjunta del sindicato docente Ademys en diálogo con Tiempo denunció que Larreta pretende aplicar su propuesta de ‘aumento’ por la fuerza, la misma que los docentes hemos rechazado en asambleas, paros, la marcha de antorchas y la vigilia en el ministerio del día miércoles. Es un decretazo encubierto.
El gobierno, de esta forma, busca evitar pagar el costo político de determinar la resolución por decreto pero ha llevado la negociación a una vía muerta desconociendo la representación sindical de los docentes.
En la provincia de Buenos Aires, el gobierno de María Eugenia Vidal también parece decidido a evitar un cierre del conflicto a través de un decreto pero apuesta a producir un desgaste de la huelga y derrotar de este modo el reclamo de los docentes. Se trata de una táctica diferente pero que persigue el mismo objetivo de desconocer los reclamos y los representantes sindicales.
Con el aumento unilateral del gobierno de la ciudad, el salario inicial de bolsillo pasaría de 11.372 a 13.000 para el cargo de maestro de jornada simple o 20 horas cátedra, un aumento de $54 por día hasta septiembre. Y a partir de septiembre sería de 13.620 pesos detalló la representante de Ademys.
Finalmente, la dirigente docente convocó a continuar la lucha en la ciudad plegándose al paro nacional del 6 de forma activa, y reclamando a las centrales sindicales que sea el comienzo de un plan de lucha nacional contra el ajuste, los despidos y los topes salariales.