Un joven de 27 años fue asesinado de un balazo en el pecho en el barrio porteño de Flores y debido al crimen, que se investiga si está vinculado a la venta de drogas, detuvieron como sospechosos a un oficial de la Policía de la Ciudad y a otras dos personas.
El hecho se produjo en la noche del viernes en el pasaje Timbó, a metros de la avenida Carabobo, cuando el muchacho, llamado Maximiliano Ezequiel Martínez, aparentemente se acercó a un Peugeot 307 negro con tres ocupantes y desde adentro le efectuaron un disparo en el lado izquierdo del tórax.
Mientras la víctima quedó gravemente herida en el piso, los agresores escaparon del lugar por Carabobo en dirección al sur, hacia la villa 1-11-14 del Bajo Flores.
Tras escuchar los disparos, los vecinos llamaron al servicio de emergencias 911 y un móvil de la comisaría 38a. se acercó al lugar e irradió un alerta a todo el sistema para dar con el automóvil, que tenía como característica principal que una de las luces delanteras no funcionaba, según describieron a los investigadores los vecinos del pasaje.
En la intersección de Bonorino y Castañares, a casi 20 cuadras de donde balearon al joven, efectivos de la Gendarmería Nacional (GNA) que también habían sido alertados del hecho detuvieron el vehículo y constataron que uno de los ocupantes era un oficial mayor de la Policía de la Ciudad, identificado como Emanuel González (27), quien portaba su arma reglamentaria, informó a Télam una fuente de la investigación.
Los tres hombres que se trasladaban en el Peugeot 307 se contradijeron en la versión que dieron sobre cómo llegaron al lugar, por lo cual fueron detenidos por los gendarmes.
Al policía se le secuestró la pistola y dentro del auto se halló una pequeña cantidad de marihuana, por lo que los tres quedaron acusados de tenencia de estupefacientes, ya que no se pudo establecer a quien pertenecía.
Mientras tanto, la muerte del joven fue constatada por el SAME al llegar al lugar, y junto a él se encontró una pipa que se utiliza para consumir pasta base, dijo un vocero.
Con respecto a si el crimen podía tener relación con la venta de drogas, una vecina del barrio dijo al canal de noticias TN que en esa cuadra hay una casa tomada, pero nunca vio que comercializaran estupefacientes en la puerta.
Debido a que las primeras versiones indicaron que en el lugar se había producido un tiroteo, la mujer dijo que por lo que ella vio ningún policía disparó, en referencia a que no observó a ningún uniformado hacerlo, y que el joven que terminó asesinado no tenía armas en su poder cuando fue asistido por los médicos.
Tras el hecho, el Ministerio de Justicia y Seguridad de la Ciudad, informó en un comunicado que el oficial, fue pasado a disponibilidad por su implicancia en un hecho delictivo y se inició un sumario administrativo por parte de la Oficina de Transparencia y Control Externo de la fuerza.
La cartera a cargo de Martín Ocampo indicó que el efectivo es miembro de la Brigada de Rápida Intervención de la Policía de la Ciudad, creada para actuar en zonas de alta concentración delictiva como las estaciones de Constitución, Retiro y Once por delitos flagrantes.
La decisión de este ministerio es de tolerancia cero con las corrupción policial y/o vinculación con el delito, por lo que ponemos todo a total disposición de la Justicia para que la investigación avance lo mas rápido posible y se esclarezca lo sucedido, agregó el informe de prensa.
Debido a que en el hecho está implicado personal policial, los peritajes para establecer lo que sucedió quedaron a cargo de Gendarmería y en las próximas horas se conocerá el resultado de la autopsia efectuada a la víctima.