Los beneficiarios del Programa Argentina Trabaja que permanecían desde el lunes a la tarde con un acampe sobre la avenida 9 de Julio, frente al Ministerio de Desarrollo Social, levantaron pasadas las 8 la protesta inicialmente dispuesta por tiempo indeterminado.
Los manifestantes mantuvieron un carril cortado desde las 17 del lunes cuando se instalaron frente a la cartera que conduce Carolina Stanley para solicitar un aumento en el monto de los 4.400 pesos que reciben del programa, así como un empleo formal.
También se manifestaron en contra de la reforma laboral porque «quita derechos a los trabajadores», de la «la reforma previsional que desfavorece a los jubilados», y de los «nuevos tarifazos en gas y luz, y los aumentos en las naftas que seguirá disparando los precios de la canasta básica», según dijo Eduardo Belliboni, dirigente del Polo Obrero.
«Levantamos el corte pero seguimos el plan de lucha y vamos a establecer una mesa de diálogo para resolver los problemas», añadió Belliboni tras una asamblea que votó el levantamiento de la protesta, y especificó que piden «un aumento de los 4400 pesos que se reciben por el programa Argentina Trabaja porque eso no llega siquiera al monto de salario de indigencia que está por arriba de los 7000 pesos».
«También solicitamos un bono de fin de año para los precarizados, trabajo genuino y pase a planta permanente», añadió en declaraciones formuladas a la prensa.
Belliboni aclaró que los integrantes del programa Argentina Trabaja «no sólo reciben capacitación sino que además desarrollan la contraprestación de servicios, no es como quieren hacer creer, que no trabajamos».
Entre las tareas que desempeñan citó «trabajo en escuelas, hospitales, plazas públicas, trabajos que tendrían que ser remuneradas por los municipios con salarios dignos».