La lucha por la no cosificación de la mujer llegó a uno de los deportes más extravagantes y que más millones produce.
El posicionamiento de la mujer en el reclamo del respeto de sus derechos avanza a paso firme y acelerado. Una nueva muestra de esto es que la empresa Liberty Media, dueña de la Fórmula 1, anunció que desde este año ya no habrá chicas en las calles de boxes de la máxima competencia motor.
Las esbeltas mujeres, habitualmente jóvenes, que solían vestirse con los colores de los países participantes y que, como estatuas, mostraban su sonrisa y los carteles con nombres de pilotos y sus autos de carrera serán reemplazados por niños, en una decisión que imita a lo que suele ocurrir en el fútbol con la salida de muchos equipos en partidos internacionales.
E invita a preguntarse cuando sucederá que voluptuosas mujeres dejen de ser vestidas con monos de los productos que se publicitan, como si fuesen carteles que sonríen ante las cámaras, como suele ocurrir también en las categorías argentinas y no hay noticias que se estuviera revisando esa circunstancia.
«Este será un momento extraordinario para estos jóvenes, parados junto a sus héroes, mirando cómo se preparan para competir. Estar junto a la élite del automovilismo en esos preciosos minutos justo antes de la salida», afirmó el director general de la Fórmula 1, Sean Bratches. Los niños irán a cada competencia acompañados por sus familiares y serán elegidos por cada escudería en función de méritos o por sorteo.
El presidente de la Federación Internacional de Automovilismo (FIA), el francés Jean Todt, indicó que iniciativa acercará a «cada joven deportista» a la Fórmula 1 como aquellos que compiten en categorías juveniles y karting.
La iniciativa de incluir a niños ya se utilizó en la Fórmula E con una prueba que se llevó a cabo en Santiago de Chile la semana pasada.