La Sala IV de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Criminal y Correccional confirmó el procesamiento del gendarme Diego Rocha, acusado del homicidio agravado de Facundo Scalzo el 17 de junio pasado en el Barrio Rivadavia del Bajo Flores.
Según detalló Romina Ávila, abogada de Andrea Scalenghe, madre de la víctima, el tribunal también habilitó que se siga investigando a Jorge Luis Pérez y a Juan Pablo Ruiz, los dos gendarmes involucrados a los que por ahora se les dictó la falta de mérito y fueron excarcelados. Ambos declararon que hicieron disparos al aire.
Una de las claves para este procesamiento fue el peritaje balístico, que determinó que el proyectil que quedó alojada en el cuerpo de Facundo partió de la pistola reglamentaria del gendarme Rocha. El peritaje comparó la bala con las tres armas reglamentarias de los gendarmes imputados.
“La causa sigue con la ampliación de varias pericias balísticas, resta peritar un proyectil que se encontró bajo el cuerpo de Facundo y queremos determinar de qué arma se disparó”, explicó la abogada a Tiempo, y agregó: “Queremos saber si pertenece al arma de Rocha o a Pérez. Los tres dijeron haber disparado, sólo que Ruiz y Pérez dijeron haber disparado al aire y Rocha dice que lo hizo directamente contra Facundo, pero esas son cuestiones que resta todavía determinar”.
El hecho que se investiga ocurrió un mes atrás en el Bajo Flores. Los tres gendarmes acudieron convocados por una disputa entre vecinos. Allí persiguieron y dispararon contra Facundo (20 años), quien cayó herido con cuatro disparos por la espalda. La familia y vecinos del joven enunciaron además que les impidieron dar auxilio al joven, quien permaneció tirado en el piso durante una hora hasta que fue trasladado por la ambulancia hasta el hospital Piñero, donde falleció.
Los testimonios de los vecinos y videos aportados por la familia fueron claros desde un comienzo para descartar la versión del “tiroteo” que hicieron los gendarmes.
La abogada confirmó que el joven no portaba armas al momento de recibir los disparos. Incluso indicó que el arma secuestrada que los gendarmes atribuyeron a Scalzo nunca fue disparada y tenía todo su cargador completo.
“Vamos a seguir cuestionando el accionar de Ruiz y de Pérez, porque el hecho sucedió en plena tarde, había un montón de vecinos deambulando por esa zona y esos tiros al aire podrían herir a cualquier persona. Este accionar deja al descubierto el procedimiento de violencia institucional que maneja la Gendarmería Nacional y las acciones por fuera del protocolo al que deben regirse las fuerzas de seguridad. Cualquier gendarme sabe que para disuadir debe disparar al piso, no hacia el aire y menos hacia las personas, y que tienen otros mecanismos que son menos lesivos para la integridad de las personas que los que tomaron estos agentes y que terminaron en la muerte de Facundo”, finalizó.