Por un momento pareció que ya no estaba, por la marea política que inundó el día a día del país desde las PASO, pero todavía existe una pandemia. Siguen llegando vacunas –un flujo constante que no se tradujo en votos–, y lo próximo en la campaña de vacunación pública, optativa y gratuita será la inmunización masiva a adolescentes sin enfermedades previas, con dosis de Pfizer y Sinopharm. Provincia ya comenzó con chicas y chicos de 17 años.
De acuerdo al Monitor Público de Vacunación, se aplicaron, hasta ayer, 656.568 dosis a menores de 12 a 17 años con factores de riesgo, y otras 6909 a esa franja etaria sin prevalencias. Ese puñado corresponde a jurisdicciones a las que les “sobraron” Moderna y decidieron aplicarlas a menores sin riesgo, o que destinaron a ese grupo las primeras 206 mil dosis de Pfizer, que empezaron a llegar en septiembre.
En el Ministerio de Salud bonaerense sostienen que hay stock suficiente de Sputnik V y AstraZeneca, por lo que los primeros lotes de Pfizer son destinados a menores sin factores de riesgo. El viernes comenzó la vacunación en Provincia a adolescentes de 17 años, y luego irá bajando por rango etario. Santa Fe, Córdoba, Río Negro, Neuquén, Salta, Santiago del Estero y Mendoza también avanzarán en el mismo sentido. “La primera dosis es la que otorga la mayor inmunidad, y se vio en la baja de casos. No disminuyeron cuando se completaron esquemas, empezaron a descender antes, con las primeras dosis”, dicen desde Salud. En CABA, mientras tanto, prefirieron destinar las primeras Pfizer para completar esquemas de vacunación.
Cuando termine el mes, el país contará con 580 mil dosis de Pfizer. Lo fuerte vendrá en el último trimestre: ahí llegarán 19,5 millones. En su mayoría, esas dosis se destinarán a cubrir a cinco millones de adolescentes sin factores de riesgo. Pero antes de esos envíos masivos de Pfizer puede haber novedades en la vacunación a menores.
La respuesta viene de Oriente: Sinopharm ya se aplica en China y en los Emiratos Árabes a la población pediátrica, con buenos resultados. Esa data la tiene hace tiempo la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat), que está pronta a sacar dictamen a favor, algo que podría ocurrir esta misma semana. Una vez aprobada, comenzará la aplicación general.
En Provincia se fueron anotando en VacunatePBA, y hoy ya hay 125 mil chicos “sanos” inscriptos en el plan de vacunación. En CABA no abrirán la inscripción hasta que Anamt apruebe. En Chile, de hecho, ya se vacuna a menores con Sinovac, también china pero de mucha menor eficacia que Sinopharm.
Lo bueno de Sinopharm es que, a diferencia de Pfizer, hay mucho stock disponible: unas 7,5 millones de dosis (1,53 millones llegaron ayer y otros 1,33 millones lo harán mañana). Y se esperan casi 10 millones más en las próximas semanas, lo que alcanzaría a cubrir también a la población más infantil. La primera tanda será con los menores de 12 a 17 años. Luego se avanzará con los chicos de 3 a 11 años.
El siguiente objetivo nacional de la campaña será vacunar con una tercera dosis a mayores de 60 años y personas inmunodeprimidas.
Si bien hay 415 casos de Delta detectados en la Argentina (sólo 42 sin nexo definido, la mitad en CABA), la nueva cepa sigue sin ser predominante, como sucedió en Europa, EE UU y otros países de la región. Para los especialistas, esto se debe a la rivalidad con otras variantes fuertes (Manaos y Andina), a la efectividad en el control de los viajeros, a la combinación de vacunas e incluso al retraso temporal entre primeras y segundas dosis que, según se comprobó, con algunas vacunas genera mayor inmunidad a largo plazo.
Mientras tanto, se avanza con las segundas dosis: el 43,25% de la población total ya completó sus esquemas. El gobierno bonaerense anunció el viernes que los mayores de 60 que se dieron AstraZeneca o Sputnik V hace más de ocho semanas, o Sinopharm hace más de 21 días, pueden acudir a recibir la segunda dosis sin turno a cualquier vacunatorio de la Provincia. «
Ciudad acelera en flexivilizar
Relegada por los avatares de la política, la pandemia sigue siendo parte central de la agenda, y la Ciudad la utilizó para volver al centro de la escena. La gestión de Horacio Rodríguez Larreta anunció varias medidas de relajación de las restricciones ante el Covid–19: desde el viernes rige una extensión horaria para el sector gastronómico hasta las 3 am; ya no es obligatorio testearse al volver de un viaje dentro del país; los eventos masivos al aire libre pasarán a un máximo de 2500 a 4000 personas; y se habilitaron los encuentros sociales sin límite dentro y fuera de los domicilios. El gobierno porteño también dictó un nuevo protocolo para las burbujas en las escuelas. De ahora en más, solo se aislará al alumno o alumna que presente síntomas. Recién si su testeo da positivo, se aísla al resto de los contactos estrechos del aula. Según se dejó entrever, en cuanto avance la vacunación en adolescentes, el próximo paso será eliminar la obligación del barbijo en lugares abiertos.