La idea original del gobierno de reimpulsar la ciencia nacional tras los años de ajuste y desinversión del macrismo terminó chocando, como todo, contra ese fenómeno mundial llamado coronavirus. Entonces los tiempos debieron acelerarse. El área, vuelta a ser Ministerio, llevó adelante un concurso para solventar 64 proyectos en relación al covid–19, y desde una Unidad creada especialmente para hacer frente a la pandemia cubrió otras líneas como respiradores, test rápidos e incluso una posible vacuna.
En medio de toda la urgencia, este martes se anunció que se destinarán otros 745 millones de pesos para el equipamiento y la modernización de la ciencia argentina, parte del dinero saldrá de los fondos reasignados de la Agencia Federal de Investigaciones (AFI), con los que promoverán la exportación de productos realizados por la comunidad científica frente al coronavirus.
La medida se hizo efectiva en una reunión este mediodía en Casa Rosada, cuando el jefe de Gabinete de Ministros, Santiago Cafiero, recibió al Ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza, y el titular de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica, Fernando Peirano.
De acuerdo a lo trascendido, el monto será destinado «a los laboratorios de ciencia y tecnología de todo el país y para escalar proyectos de I+D, «tras años de falta de inversión en el sector», según afirmaron.
El objetivo –aseguraron desde Jefatura de Gabinete– es reactivar las acciones de equipamiento, modernización y trabajos de infraestructura del Fondo para la Investigación Científica y Tecnológica (FONCyT) de la Agencia I+D+i. Y también, otorgar fondos a la producción de los test de detección de SARS-Cov-2 desarrollados por científicos nacionales.
En cuanto a los fondos de la AFI, adelantaron que permitirán la puesta en marcha de un programa especial para el escalamiento y la preparación «para la exportación de los dispositivos diseñados por las científicas y los científicos y las tecnólogas y los tecnólogos, apoyados en las diferentes convocatorias realizadas en el marco de la respuesta frente al coronavirus como, por ejemplo, los test de diagnóstico serológico y moleculares surgidos desde el CONICET y las Universidades Nacionales».
A principios de mayo, la Agencia había seleccionado 64 proyectos, entre 900 presentados, para impulsar desarrollos en un plazo de tres meses, con cien mil dólares de financiamiento, ante el actual contexto de la pandemia, desde diseño y fabricación de gabinetes para la toma de muestras de pacientes o la producción biotecnológica de la proteína S completa del SARS–CoV–2 para fines diagnósticos y terapéuticos, hasta big data que mida en tiempo real el impacto del covid y las medidas para su contención en la población.
En ese momento, Fernando Peirano, presidente de la Agencia I+D+i, señaló: “Además de fortalecer la capacidad de respuesta, estamos sentando las bases para el desarrollo de este nuevo sector ligado a las capacidades sanitarias, que va más allá de los servicios de salud y seguramente crecerá muy rápido una vez superada la crisis que impuso la pandemia”.