El gobierno porteño anunció que el uso del barbijo dejará de ser obligatorio en los espacios al aire libre donde no haya aglomeraciones de personas, así como en los recreos de las escuelas como parte de las medidas ante una “evolución favorable” de la situación sanitaria del coronavirus y por el avance del plan de vacunación que alcanzó al 70% de la población con dos dosis en el distrito.
La decisión fue informada por el jefe de Gobierno de la Ciudad, Horacio Rodríguez Larreta, durante una conferencia de prensa que dio tras una recorrida por el vacunatorio de River Plate, en el barrio de Núñez, junto a parte de su gabinete.
Allí dijo que “hoy la Ciudad va a llegar al 70% de la población con la vacunación completa” contra la Covid-19 y precisó que los datos epidemiológico muestran que se registra “un promedio de 142 nuevos casos diarios y hay un nivel de ocupación de camas de terapia intensiva del sistema público con pacientes con coronavirus del 3,2%”.
“Esta situación sanitaria, sumado al avance del plan de vacunación, nos permiten dar otro paso más en la vuelta a la normalidad”, indicó Rodríguez Larreta, quien estuvo acompañado por el ministro de Salud, Fernán Quirós; la ministra de Educación, Soledad Acuña; el jefe de Gabinete, Felipe Miguel, y el secretario de Transporte, Juan José Méndez.
En ese marco, detalló que a partir de este miércoles no será obligatorio usar el barbijo en los espacios al aire libre, en tanto su utilización permanecerá vigente en lugares cerrados y en los abiertos donde haya concentraciones de personas ya que aumenta el riesgo de transmisión viral.
Además, se permitirá a los alumnos de las escuelas porteñas que se quiten el tapaboca cuando salgan a los recreos escolares y al momento de realizar actividades al aire libre en los patios de los establecimientos; no obstante en el aula deberán tenerlo colocado.
El uso obligatorio del barbijo o tapabocas comenzó el 15 de abril del 2020 para espacios cerrados como locales comerciales y en el transporte público; en tanto el 4 de mayo se amplió a los lugares al aire libre como parte de las acciones que buscaban prevenir contagios de coronavirus a pocas semanas de declarada el aislamiento social, preventivo y obligatorio el 20 de marzo.
Otra de las medidas que regirán desde mañana en la Ciudad contempla la eliminación de la toma de la temperatura que se efectuaba a la población antes de ingresar a espacios cerrados como escuelas o locales comerciales y que también fue adoptada como parte de los protocolos sanitarios para evitar contagios.
Por último, en el transporte público se retiró la restricción en torno a la capacidad máxima de pasajeros establecida para trenes, subtes y colectivos.
Pero, al tratarse de espacios cerrados, se mantendrá vigente el uso del tapaboca y, a modo de recomendación, tener las ventanillas abiertas para optimizar la ventilación.
Durante el contacto con la prensa, Quirós sostuvo que “la Ciudad está en un momento epidemiológico muy conveniente y los indicadores sanitarios están en valores bajos” y agregó “que la tasa de positividad de testeos está alrededor del 2%”.
También explicó que “hay que lograr completar la vacunación de las primeras dosis a los grupos de riesgo o que tienen mayor interacción social; nos quedan todavía algunos jóvenes y, sobre todo, estamos completando los adolescentes, vamos por 14 años de edad y después los de 13 y 12; luego hemos vacunado a los niños de 3 a 11 años con condiciones priorizadas y posteriormente abriremos la inscripción al resto de los niños de esa edad”.
Por otro lado, insistió en que lo más importante es “cumplir con la normativa respecto de los aforos y tener en claro que en eventos deportivos es obligatorio” el uso del tapabocas, al ser consultado por lo que ocurre en las canchas de fútbol.
“Después de terminar todo eso, comenzaremos nuevamente el debate sobre las terceras dosis”, indicó y estimó que ello “podrá ser antes de fin de año o en los primeros meses del año que viene”.