Australia aprobó el trigo HB4, un desarrollo 100% argentino que es resistente a la sequía. El HB4 surgió tras una colaboración de 18 años entre Instituto de Agrobiotecnología del Litoral (CONICET-UNL) y una empresa de biotecnología.

Si bien la harina de trigo HB4 fue aprobada en Brasil a finales del año pasado el producto está bajo la mira de la justicia argentina, que como publicó Tiempo en noviembre de 2021 ordenó publicar toda la información disponible sobre el desarrollo de trigo transgénico.

La aprobación del gobierno australiano es un hecho histórico para la Argentina: el país oceánico tiene uno de los sistemas regulatorios más rigurosos del mundo. Además es el quinto productor global de trigo detrás de China, India, Rusia, Estados Unidos.

La investigadora Raquel Chan dirigió un equipo que trabajó a partir de un gen descubierto en el girasol que fue implantado en la soja transgénica además de en el trigo para hacerlo resistente a las bajas precipitaciones.

“¡Gran noticia! Australia aprobó el Trigo #HB4 tolerante a la sequía desarrollado en Argentina.

Se trata de otro enorme paso adelante que da cuenta de la calidad y el potencial que tiene la ciencia en nuestro país”, publicó el Ministro de Ciencia y Tecnología, Daniel Filmus, en su cuenta de Twitter.

Tiempo había publicado que tanto productores agroecológicos como trigueros comerciales que forman parte del agronegocio habían coincidido en presentaciones judiciales y pedidos al gobierno nacional para evitar la liberación del enemigo en común: el trigo transgénico.