Familiares y amigos de Lucas González, el futbolista de Barracas Central asesinado de un disparo en la cabeza por efectivos de la Policía de la Ciudad en noviembre de 2021, realizarán este jueves un acto frente al Palacio de Tribunales para pedir justicia al cumplirse un año del crimen del joven de 17 años.
La concentración está prevista para las 19 frente a la sede judicial ubicada en Talcahuano 550, entre Lavalle y Tucumán.
Ayer, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 25 fijó para el 16 de marzo de 2023 el inicio del juicio oral al que serán sometidos 14 efectivos de la Policía de la Ciudad acusados del crimen.
«La causa está en un año elevada a juicio oral ante el Tribunal Oral 25 y el 16 de marzo del 2023 comienza el debate oral donde se van a delimitar las responsabilidades de los asesinos y de los encubridores», aseguró a Télam Radio el abogado Gregorio Dalbon, representante de la familia de Lucas y de sus tres compañeros.
El letrado agregó que la detención de 14 policías de la Ciudad vinculados al homicidio «es un hecho histórico para la Argentina por el rango que tienen cada uno, hay varios comisarios y oficiales mayores».
«Hoy jueves 17 de noviembre a las 19 horas en Plaza Lavalle, los compañeros de Lucas, los que estuvieron el día del asesinato van a dar la versión de los hechos y van a agradecer a la multitud que vaya», concluyó el letrado.
Los principales oradores del acto de esta tarde serán los padres de Lucas, Héctor «Peca» González y Cintia López, mientras que también tomarán la palabra los tres amigos que estaban con la víctima cuando la mataron, quienes también fueron perseguidos y sometidos a torturas por parte de los policías.
Los padres de Lucas pidieron especialmente a los asistentes que lleven una vela o una bandera argentina, pero sin consignas políticas.
«Si quieren pueden ir con un cartel de Lucas o si son familiares de víctimas llevar las fotos de sus ángeles, pero no queremos politizar la concentración. Vengan con una velita o con una bandera argentina», dijeron.
El crimen de Lucas ocurrió en la mañana del 17 de noviembre de 2021, cuando el joven y tres amigos salieron del entrenamiento en el club de fútbol Barracas Central y se subieron al Volkswagen Suran del padre de uno de ellos, para volver a la localidad bonaerense de Florencio Varela, donde vivían.
Tras detenerse en un kiosco, comenzaron a ser perseguidos por un Nissan Tiida, en el que circulaban tres policías de la Brigada 6 de la Comisaría Vecinal 4D, quienes realizaban tareas de campo en la intersección de las avenidas Iriarte y Vélez Sarsfield.
De acuerdo con la investigación, los policías informaron al servicio de comunicaciones policiales que perseguían un automóvil con «cuatro masculinos con apariencia menores, jóvenes», refirieron «que estaban armados», y les cruzaron el Nissan Tiida para detenerlos.
Como el automóvil de la brigada no tenía ninguna identificación ni los policías vestían chalecos ni uniformes policiales, los chicos pensaron que podían ser ladrones y quisieron escapar, pero fue entonces cuando los efectivos policiales dispararon contra el Volkswagen Suran.
Lucas recibió dos disparos, uno de ellos en la cabeza, que produjo su muerte al día siguiente en el Hospital El Cruce, de Florencio Varela.