La historia de Tatiana, con un embarazo a los 14 años, les pone rostro a las estadísticas de altos índices de maternidad temprana en Chaco, donde hay escasez de insumos que permitan decidir sobre la salud sexual reproductiva. Una provincia donde el Plan de Embarazo no Intencional en la Adolescencia (ENIA) comenzaba a bajar el índice de niñas y adolescentes madres. Y luego de su desfinanciamiento, una luz de esperanza se acaba de aprobar en la Cámara de Diputados: la Ley 1017, que crea el Plan Provincial para reemplazar al ENIA.
Tatiana tenía 14 años cuando quedó embarazada. Antes de encontrarme con ella, traté de hacer una analogía con mi adolescencia, donde mi única preocupación era qué ponerme para las fiestas de 15 que comenzaban a celebrarse. ¿Qué habrá sentido?
“Tenía mucho miedo, creía que mi mamá se iba a enojar tanto que me iba a echar de la casa”, recuerda sobre aquella mujer que le había informado sobre los métodos anticonceptivos: “Yo no le hice caso”, sonríe avergonzada Tatiana.
Ahora tiene 15 años, no tuvo la fiesta que soñaba porque su bebé estaba a punto de nacer.
Cuenta que cuando termine el secundario quiere ser policía. Muchas chicas y chicos chaqueños que saben que van a necesitar un trabajo rápido para poder vivir un poco mejor que sus familias, piensan en esa opción.
Me pregunto si Tatiana sabe que puede ser bailarina, ingeniera, científica, médica. ¿Tendrá las mismas oportunidades que otras pibas de “probar” diferentes carreras? ¿De equivocarse y volver a empezar?
Estamos en un patio de cemento bajo un gran tinglado techado que hace las veces de salón de actos en cada fiesta de la escuela. Es la E.E.S. N° 118 que todavía no tiene nombre porque la comunidad, mayoritariamente qom, no lo define aún. En Resistencia, la capital chaqueña, es conocida como la “Escuela del Barrio Mapic”, situada en las afueras de la zona norte de la ciudad. Según la leyenda mocoví, el Mapic era un árbol que servía de alimento en los montes chaqueños. En algún momento, entre la escuela y el Centro de Salud del barrio, había un gran ejemplar, pero la “civilización” también arrasó con el.
La primavera nos da un respiro del calor intenso en una siesta nublada. La polvareda de las calles de ripio se aviva con el viento norte y resabios del humo que todavía queda en el ambiente, por los incendios en países vecinos. Logran en conjunto un paisaje sofocante.
La escuela se alborota un poco, las y los chicos preguntan, espían por las ventanas de las aulas. La charla con Antonia Alegre, la directora, y las docentes Flavia Vazquez y Patricia Peña que acompañan a Tatiana en una mesa de custodia amorosa, habla de la fuerza de contención, rol que cumple la escuela más allá de su función educativa. Tatiana se siente cuidada, pero le cuesta hablar de ser madre. Es que todavía es casi una niña y tuvo que aprender a cuidar, a dormir menos, a medir la fiebre, a saber, que alguien ahora depende de ella. Aunque ella depende todavía de su mamá.
“Tuvimos muy buenos resultados con el Plan ENIA”
Flavia, una de las docentes que participa de la entrevista dice: “Tuvimos muy buenos resultados con el Plan. De hecho, este año tenemos sólo dos chicas con hijos, a diferencia de tiempo atrás que había varias más”, y así hace anclaje en una realidad que conoce y muestra la reducción de la tasa de fecundidad temprana que el Plan ENIA logró. En todo el país bajó casi a la mitad.
La directora Antonia Alegre hace unos 15 años que trabaja en la escuela y conoce bien a la comunidad. Cuenta que el Plan ENIA se implementó hace unos 4 años allí. “Nosotros siempre estamos atentos a acompañar a los chicos, desde antes del Plan incluso, y más ahora que no está más. Los acompañamos al Centro de Salud, pero ahora, no siempre hay disponibilidad de anticonceptivos. Con el Plan los referentes tenían charlas, los aconsejaban y daban diferentes opciones”, explica.
Según un informe elaborado por las profesionales responsables de la ex Mesa de Aplicación Territorial del Plan, Liliana Encisa y Natalia Kozlakowski, del Programa Provincial de Procreación Responsables “durante los últimos 3 años se colocaron 30.733 implantes subdérmicos y en los últimos 5 años se colocaron 10.225 dispositivos intrauterinos” a chicas menores de 20 años, solamente adolescentes de los departamentos comprendidos en el Plan ENIA. Esta documentación ha sido presentada a las actuales autoridades para su valoración.
“Con ENIA tuvimos herramientas para ayudarlos con varias problemáticas, tuvieron charlas sobre violencia de género, en el noviazgo, fortalecimiento de su autoestima”, aporta Flavia.
La otra docente, Patricia, asiente con la cabeza y específica que “era un anclaje importante con Salud y Educación. Si un alumno necesitaba un turno con el psicólogo, el referente se ocupaba de gestionarlo y nosotros acompañábamos al chico. Hoy, esa es una posibilidad que los pibes no tienen”.
El Ejecutivo Nacional, trajo entre otros recortes, el desfinanciamiento del Plan ENIA. En Chaco, tenía presencia en tres departamentos con altas tasas de fecundidad: Güemes, al Norte en la región de El Impenetrable, Chacabuco, al Sudoeste productivo y San Fernando, en el Este, comprendiendo al Gran Resistencia. Desde Nación, no se renovaron los contratos a las personas encargadas de llevarlo a cabo y tampoco se invirtió más presupuesto en la compra de insumos para la prevención.
En el informe entregado a la actual gestión, las médicas responsables del Plan, recomiendan como “estratégico sostener su implementación para seguir generando oportunidades educativas y de inserción laboral de adolescentes, y así reducir los costos sociales y económicos para las familias, la sociedad y el propio Estado”.
El detalle pormenorizado de los resultados, sólo arroja saldos positivos desde la implementación del ENIA durante la gestión de Mauricio Macri como presidente. El programa comenzó a fines de 2017, se sostuvo durante toda la gestión de Alberto Fernandez y quien tomó la decisión de desfinanciarlo, fue la actual gestión de Gobierno.
Citando el Estudio MILENA, realizado por el Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA), las profesionales chaqueñas en el informe entregado a la gestión provincial hablan de la conveniencia de dar continuidad al Plan ENIA, tanto en lo relacionado a la perspectiva de derechos, como en términos económicos: “Los 4578 recién nacidos productos de embarazos no planificados costaron $9.474.303.762, cubrir a 4578 personas con implante subdérmico por 3 años cuesta $933.768.000, es decir menos del 10% del costo del control de embarazo, parto, puerperio y control de recién nacido. El Estado ahorra $8.540.535.762”, detallan.
En ese estudio, “UNFPA reitera su disposición a colaborar con el Estado Argentino para prevenir el Embarazo No Intencional en la Adolescencia. Para ello provee asistencia técnica en el diseño, monitoreo y evaluación de políticas. UNFPA ha desarrollado un conjunto de herramientas y modelos cuantitativos para planificar, costear, simular y evaluar impactos”.
Apostar al futuro
Trato de romper el silencio, mientras pienso ¿Cómo hablo con una pequeña de 15 años sobre la maternidad? ¿Qué es necesario saber? ¿Es preciso su testimonio para que no sean sólo cifras? No quiero hacerla sentir incómoda y elijo un tono amigable, como cuando hablo con una de mis hijas.
“Mi panza empezó a crecer y me sentía muy rara”, comparte Tatiana.
“No quería tener un hijo, no lo busqué, pero vino”, cuenta, mientras abre sus hermosos ojos grandes y deja atrás la posibilidad remota de una práctica de IVE (Interrupción Voluntaria del Embarazo). “Ni siquiera lo pensé”, afirma. Asume que “no es fácil”, pero que está aprendiendo y que su madre le enseña: “Cuando tengo que venir a la escuela mi mamá cuida al bebé, porque intenté traerlo, pero no me deja hacer la tarea”, precisa.
Quedó embarazada cuando había comenzado el segundo año del secundario. Primero “por vergüenza”, comenzó a faltar a la escuela. “Mi panza empezó a crecer y me sentía muy rara”. Después, cuando nació el bebé, la prioridad era cuidar de él y eso la llevó a asistir cada vez menos, hasta que finalmente repitió el segundo año.
En la escuela tienden puentes para facilitarles el trayecto educativo. Les permiten asistir a clases con sus bebés y acercan las herramientas con las que cuentan, para que ellos logren la terminalidad educativa. Pero “no es fácil”, describe Tatiana. “Cuando mi mamá no puede cuidarlo, lo traigo, pero a veces no puedo prestarle atención, así que prefiero quedarme en casa a cuidarlo”.
Busco formas de cómo preguntarle qué futuro quiere para ella y su hijo, a una adolescente de 15 años que está aprendiendo a ser madre, mientras debería estar estudiando. Sin embargo, ella parece tener una idea más clara: quiere ser policía, para darle una mejor vida a su pequeño, “que no le falte nada”, dice cuando se retuerce su cabello largo sobre el lado izquierdo de su hombro, muy tímidamente.
Tatiana junta sus útiles para volver a casa. Allí la espera el cuidado de un niño, los quehaceres hogareños, ayudar al padre en su trabajo y si le queda energía, deberá hacer la tarea para volver a la escuela mañana. La que le da esperanzas, la que es puente hacia un porvenir mejor.
“Son empujadas por sus familias a juntarse a temprana edad”
Las costumbres ancestrales de pueblos originarios que naturalizan las maternidades tempranas, también juegan un rol preponderante a la hora de respetar la autonomía adolescente. El Plan ENIA ha dejado constancia que, con herramientas para su propia preservación, las chicas y los chicos han ido cambiando su manera de ver el mundo, para favorecer sus desarrollos personales.
Sonia Filimon, es profesora bilingüe (lengua qom) y trabaja en la escuela como auxiliar docente. Pese a que al barrio lo separan 20 cuadras del microcentro de Resistencia, allí todo es escaso. Las pequeñas viviendas son superpobladas y el hacinamiento contribuye a que las adolescentes busquen formar nuevos hogares a temprana edad. Como escapando de un destino que intenta la esperanza de ser mejor.
“Yo también tuve mi primera hija a los 16”, cuenta Sonia. “Ahora tienen otro pensamiento, buscan cumplir sus deseos primero y ven cómo cuidarse”, dice, haciendo alusión a la información del Plan ENIA.
Aunque estas costumbres cambian de acuerdo al contexto: “Las chicas que viven en zonas urbanas y acceden, aunque sea a través de Internet a cómo cuidarse, tienen posibilidades de cambiar su cosmovisión, pero las que están en el interior profundo, todavía son empujadas por sus familias a juntarse a temprana edad”, aclara Sonia.
Ella creció entre esas tradiciones que la llevaron a postergar su desarrollo personal, en pos de la maternidad: “Mi primera hija nació a mis 16, recién pude estudiar a los 38 y con 51 años no hace mucho que pude empezar a trabajar”.
Chaco compró insumos
Natalia Kolakowski, Coordinadora del Programa de Educación para la Salud y Procreación Humana Responsable de la Provincia, aseguró en un informe solicitado para este artículo: “No tengo conocimiento sobre un Programa Provincial que reemplace al Plan ENIA, porque el mismo requería la participación de varios ministerios, varias direcciones y programas para llevar adelante tan laboriosa tarea, además del recurso humano contratado por Nación para desarrollar actividades en la provincia”
Para acceder a la información pública en la Provincia se debe acudir a la aplicación oficial Tu Gobierno Digital, a través de un sistema de trámites que atraviesa diferentes filtros y organismos hasta obtener la respuesta con los datos solicitados mediante un documento oficial, con términos estipulados por la propia app. De esta forma dimos con el actual stock de insumos con que se cuenta, para la salud reproductiva de la población.
Ante la insuficiente provisión de insumos, el Programa que dirige Kolakowski, solicitó una compra que se concretó en agosto pasado mediante “concurso de precios y por licitación pública”.
Como grafica el cuadro del informe oficial, hubo compras que se redujeron en un 57% en el caso de blisters de pastillas anticonceptivas, preservativos en un 24% respecto de la compra del año pasado y no se compraron DIU hasta el momento (0%).
En la compra que este año hizo la Provincia se priorizó la adquisición de anticonceptivos, por sobre los medicamentos para acceder al derecho a la ILE (Interrupción Legal del Embarazo) o IVE (Interrupción Voluntaria del Embarazo) , según se detalla en el informe oficial.
El desfinanciamiento del Plan ENIA generó preocupación en la sociedad e incluso en diversos partidos políticos, como el PRO, Unión Por la Patria y Encuentro Federal que han presentado proyectos de leyes que buscan sostener las políticas públicas de prevención de embarazos no intencionales en el Congreso, mediante una ley nacional.
En Chaco, también se presentó un proyecto, que ahora es la Ley 1017 que plantea la creación, promoción y regulación del Plan Provincial de Reducción y Prevención del Embarazo no Intencional en la Adolescencia.
Son cuatro líneas de acción a través de una intervención intersectorial que asegure que se adapte a las realidades locales: fortalecimiento de la Educación Sexual Integral; asesorías en Salud Integral en las escuelas; mejora de los servicios de salud sexual y reproductiva; y dispositivos comunitarios. El Plan Provincial contempla a adolescentes desde los trece años hasta alcanzar la mayoría de edad, en todo el territorio provincial, con especial atención en los Departamentos San Fernando, Güemes y Chacabuco.
Busca dar “garantía real y efectiva de los derechos sexuales, reproductivos y no reproductivos de los y las adolescentes”, rezan parte de los fundamentos de la iniciativa presentada por la diputada de la oposición (Bloque Justicialista), Pia Chiachio Cavana, y que recibió 20 votos favorables y sólo dos negativos.
Por su parte, Fabiana Pelizardi, Coordinadora del Programa Provincial de Salud Integral en la Adolescencia, del Ministerio Salud local, anticipó que desde la Provincia se busca fortalecer las Asesorías en Salud Integral Adolescente en Escuelas Secundarias (ASIES). Si bien aún no se implementó la medida, según detalló la funcionaria, la misma buscará “favorecer las condiciones para el ejercicio del derecho a la salud en general y a la salud sexual y reproductiva en particular, a través de un dispositivo específico en la escuela y mediante el trabajo conjunto con el centro de salud y la institución escolar” de cada zona.
En un informe que fue entregado mediante las vías protocolares de la app mencionada anteriormente, “esto implica una visión de territorialidad que permite contemplar las características propias de cada comunidad donde se implementen”. Las ASIES, política pública que el Ministerio local pretende reemplazar al Plan ENIA.
También desde organizaciones nacionales y del exterior, proponen alternativas En septiembre se lanzó en la Ciudad de Buenos Aires la campaña federal #PuedoDecidir .que busca promover y garantizar a niñas, niños, niñes y adolescentes el derecho a la información para su autonomía.
Con spots audiovisuales protagonizados por jóvenes de las ONGs que la impulsan, desarrollan mensajes centrados en cuatros ejes: métodos anticonceptivos y de cuidado; placer y consentimiento; acceso a la información para decidir libremente; y el acceso al conocimiento de los derechos sobre la IVE/ ILE. También tiene un sitio web https://puedodecidir.org/ y una cuenta de Instagram con información clarísima para un cómodo acceso de las y los jóvenes.
Esta nota forma parte del trabajo «Tiempo de narrar. Territorio de historias», una alianza entre Tiempo Argentino con la Red de Editoras de Género y Unfpa Argentina.
* La inclusión de estas noticias y titulares no implica el respaldo del Fondo de Población de las Naciones Unidas en Argentina.