Ya son 25 años con la música. Pero en realidad toda la vida de Yacaré Manso estuvo relacionada con el sonido y la poesía. Su cuarto de siglo en la música profesional lo celebra con la edición de su séptimo disco Eucalipto, nueve canciones inéditas, con invitados como Franco Luciani (armónica) Enzo Demartini (voz, acordeón) y Lissa Tinôco, (voz), donde le canta, como siempre a su tierra. Además, tendrá un concierto especial para presentarlo este sábado 7 de octubre en Café Berlín, donde se presentará por primera vez.

“Esto arranca con canciones que estaban dando vueltas y me tome el tiempo para que vayan tomando forma. Eucalipto es un disco que nació como un desahogo, que de manera inevitable y natural se dio. Es como una regresión a la infancia: como el olor de una comida que te hace acordar a un momento; bueno a mí el olor a eucalipto me rememora a mi pueblo, a esas tardes cuando íbamos a buscar a mi abuelo a la estación, que era ferroviario. O los vapores que hacíamos con este árbol sanador. Y bueno estas canciones canalizaron mis experiencias emocionales de los últimos años. Una especie de depuración necesaria”, afirma el músico correntino quien busco una sonoridad diferente usando guitarras, sintetizadores y secuencias rítmicas. Este era un disco que nació previo a la pandemia.

“Nos tomamos un tiempo. Reivindico la medicina natural, es un disco homenaje a los árboles, en contra de tanto desmonte. Siempre reivindico la naturaleza en mi música, es parte de mi tarea. Siento que un humilde aporte a una lucha que me excede a mi como artista”, puntualiza.

Para él hay un hilo conductor en lo sonoro y poético dentro de este trabajo. “Es algo conceptual. Las partes hacen un todo: cuatro de las nueve canciones fueron sueños que tuve, que transcurrían en mi pueblo, en carnavales o en esas tardes de espera jugando.  Y de alguna manera los fui traduciendo en canciones. Un nuevo método de poetizar y musicalizar esas experiencias oníricas. Me deje la libertad de poder hacerlo. Siempre estoy rondando mi paisaje, mi tierra, mis vivencias de chico. La lejanía hace que la añoranza sea una inspiración y no algo que me hace sufrir o que padezca. Es un camino frecuente para mí”.

El nacido en Santo Tomé siempre está recordando, el río, el monte, los paisajes potentes de la Mesopotamia. “Son paisajes litoraleños que a los cancionistas nos facilitan el trabajo, porque suman un aura que tiene por sí solo, solo por evocarlo. Hace 18 años que me vine a Buenos Aires. Y cada momento le doy más valor a ese entorno en el que me crie. Le doy valor a eso. Historias y secuencias diferentes en los siete discos, pero es inagotable la fuente de inspiración. Ese color, ese sonido está dentro mío; y estoy agradecido a eso.”

Yacaré Manso.

Yacaré Manso nunca se consideró un chamamecero o folklorista típico, sino un explorador. “Me formé y encontré un lenguaje distinto. Yo vengo más del rock: más del palo de Divididos, los Piojos, Spinetta, Páez, Charly. Pero me gusta experimentar diferentes sonoridades, tengo la inquietud de buscar siempre algo distinto y propio. No me quiero etiquetar o encorsetar: puedo hacer una cumbia, un reggae, o lago más rockero o chamamé. O una canción pop. Pero bueno, lo que es innegociable para mi es la línea poética. Lo que quiero cantar es lo que voy hacer, pero adornado como sea, como me nazca en ese momento de creación. Siempre soy consecuente con mi búsqueda expresiva”, define el músico.

Su padre era un acordeonista típico del chamamé clásico. Pero su madre se separa de él cuando el pequeño Yacaré tenía 4 años, pero algo en la sangre quedó: “Mi abuelo también tocaba el acordeón, así que viene de generaciones anteriores, aunque no haya convivido mucho con mi viejo. El estímulo también estuvo mucho en la escuela, donde el repertorio litoraleño era algo bastante difundido.  Y también los carnavales, ya que son algo importante para nosotros. Los tambores fue lo que tuve más a mano,  y vivíamos cerca de la frontera con Brasil, lo me dio mucha influencia también que uno no se da cuenta pero que aparece”.

El año que viene  tendrá una banda nueva, que irá en el camino del sonido de Eucalipto, más pop-rockera. “Más allá de lo que suceda con las elecciones, tendremos que poner lo mejor, para seguir nuestro camino, porque es en lo que creemos. La música nos va salvar, como en la pandemia, de eso estoy seguro”.

Yacaré y su tierra.



Yacaré Manso 

Cumple 25 años con la música y lo celebra con la edición de su séptimo disco, Eucalipto. Lo presentará este sábado 7 de octubre a las 23 en Café Berlín, Av. San Martín 6656.