Un miembro de la mafia rusa quiere salirse del negocio y para eso intercepta a un profesor universitario de literatura y le pasa información (sin que se dé cuenta) para que haga llegar al servicio secreto inglés. Entre su inocencia y la desconfianza de las partes que debe contactar, el film trata de mostrar los cambios en la personalidad de un burgués intelectual disconforme con su vida y su destino, cuando es obligado a la acción y a la toma de decisiones más prosaicas, y útiles (incluso para la vida intelectual).

Basada en una novela de John Le Carré, el film no consigue que esos cambios se noten en el personaje que encarna Ewan McGregor, excepto en los más superficiales, como los de reconocer una fuerza desconocida para golpear o huir o resolver situaciones extremas. Poco hay de esos cambios en su visión de la literatura que enseña, y menos en cómo la enseña, o sea, en la vida que seguirá practicando. Sus cambios fluctúan entre el burgués asustado y el que se acerca a posiciones irreductibles para justificar su accionar poco transparente, cuando no ilegal.

Más allá de que la figura de su “partenaire” ruso (Stellan Skarsgård) le resulte simpática a medida que va mostrando su costado humano (el film parece descubrir que incluso los mafiosos rusos lo tienen), eso no le sirve a Ewan para releerse a sí mismo, más bien lo hace sentirse más bueno y capaz de lo que es. En vez de guiarse por la historia el film fueza situaciones, perdiendo atracción a medida que transcurren los minutos. Incluso la acción, pese a no estar mal, carece de vuelo y hasta de decisión.

La tensión que el film pretende instalar desde el comienzo nunca aparece. No es que falla a poco de andar, pero sí a poco de andar queda en evidencia. Sus nuevos esfuerzos por conseguir su objetivo se van desdibujando más rápido a medida que avanza, ya que el truco se hace cada vez más evidente. Una pena en verdad. La historia daba para mucho más. Siempre es bueno saber qué se hace con la propia historia y lo aprendido cuando se la pone en juego en territorio desconocido.

Un traidor entre nosotros (Our Kind of Traitor. Reino Unido, 2016). Dirección: Susanna White. Guión: Hossein Amini. Con: Ewan McGregor, Stellan Skarsgård, Damian Lewis, Naomie Harris, Alicia von Rittberg, Grigoriy Dobrygin, Jeremy Northam, Mark Stanley, Pawel Szajda. 108 minutos. Apta mayores de 16 años.

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