Se hizo esperar pero por fin llegó el día. La legendaria banda británica The Cure lanzó este viernes su nuevo disco, Songs of a Lost World, 16 años después de su anterior trabajo de estudio. Robert Smith, su líder indiscutido, se la pasó esos años diciendo que ya estaba a punto de terminarlo pero siempre faltaba un poco más. Las canciones, de hecho, sonaron en vivo en la reciente gira mundial del grupo, pero quiso perfeccionarlas en el estudio para finalmente conmover con un álbum oscuro y sombrío sobre la pérdida y el dolor en la vida adulta, que supera por mucho las expectativas.

Smith lo compuso de luto mientras lloraba la muerte de su madre, su padre y su hermano. Son ocho canciones que suman 50 minutos del más puro rock gótico y que la banda presentó este jueves en vivo en la BBC. Allí se vio al bajista Simon Gallup con una remera con la leyenda “Buenos Aires”.

Lo nuevo de The Cure

A fines de septiembre, el grupo había lanzado el single “Alone”, el primer sencillo de Robert Smith, Simon Gallup, Jason Cooper, Roger O’Donnell y Reeves Gabrels en 16 años, con la que abrieron la gira que arrancó en 2022, en la que presentaron todos los temas.

Smith, de 65 años, guitarrista, cantante y compositor de todas las canciones, explicó entonces: “Tan pronto como tuvimos esa pieza musical grabada supe que era la canción de apertura, y sentí que todo el álbum se enfocaba. Llevaba un tiempo luchando por encontrar la frase de apertura adecuada para la canción de apertura adecuada, trabajando con la simple idea de ‘estar solo’”. “Este es el final de cada canción que cantamos. El fuego se redujo a cenizas y las estrellas se apagaron con lágrimas”, dicen los de Crowley en “Alone”.

The Cure en Argentina en noviembre pasado.
Foto: Pablo Añeli / Télam

Songs of a Lost World es el decimocuarto álbum de estudio de la banda. Su lanzamiento se fue postergando una y otra vez. Cuando el grupo cumplió 40 años en 2018, Smith lo anunció para 2019. Pero pasaron cinco años más y una gira que los trajo a la Argentina en noviembre de 2023. Las primeras reseñas ya dieron su bendición al trabajo y reafirmaron a The Cure como una de las bandas más importantes de la historia.

“Tenemos que hacer un disco más. Tiene que ser el más intenso, triste, dramático y emocional de los que hemos hecho y después simplemente irnos”, dijo el tecladista Roger O’Donell en una entrevista con la revista Classic Pop en 2020.

Songs of a Lost World  se destaca por su calidad instrumental, con una atmósfera a base de pianos, guitarras, violines y sintetizadores que envuelve y mantiene en vilo hasta el momento en el que la voz de Smith hace su aparición en cada uno de los ocho temas.

“Prométeme que estarás conmigo en el final, decí que estaremos juntos y sin remordimientos”, canta Smith en “And Nothing Is Forever”, mientras que en “A Fragile Thing” asegura que “no hay nada que puedas hacer para cambiar el final” mientras pone banda sonora a la fragilidad del amor.

Este álbum podría ser el último de la carrera profesional de The Cure, como pronosticaba O’Donnell, pero sin duda es una retrospectiva vital, porque Smith mira atrás en “All I Ever Am” y confiesa que pasó toda su vida reflexionando sobre el tiempo y los recuerdos.

Como no podía ser de otra forma, “Endsong” cierra el disco con unas estrofas que son a la vez viscerales y nostálgicas, en las que Smith se pregunta en qué momento ese chico con ganas de comerse el mundo envejeció tanto y qué le deparará la última etapa de su vida.