Desde el 2 de diciembre de 2016 hasta el 20 de octubre de 2023 pasaron casi siete años. El período de tiempo comprendido entre el lanzamiento del último trabajo de estudio de los Rolling Stones, Blue and Lonesome, y su flamante nuevo álbum, Hackney Diamonds, estuvo atravesado por diferentes momentos. Giras, ediciones de viejos conciertos de la banda, reediciones homenaje con algún tema inédito, simples en pandemia, la salud de Ronnie y la muerte de Charlie, entre otros.
Pero todo esto no alcanzó para aplacar la ansiedad de cosas nuevas en formato de larga duración. Es que si bien Blue and Lonesome llegó para cortar con once años sin trabajos de estudio, había que remontarse a 2005 (a la salida de A Bigger Bang) para hablar de una producción de canciones originales de los chicos de Londres. Dicha ansiedad no solo se gestó naturalmente, como le pasa a los fans cuando su banda predilecta no entrega nuevo material, sino que fueron los amagues de los propios Stones los que acrecentaron aún más la necesidad del bendito disco nuevo.
Es que ya en julio de 2017, tan solo siete meses después de la salida del álbum azul, Keith Richards avivó la brasa: “Estamos grabando cosas nuevas y viendo para qué lado ir”. Más tarde, en marzo de 2018, el propio guitarrista volvió a sugerir que tramaban algo: “Está en las primeras etapas. Tenemos algunas cosas, lo cual es muy interesante”.
En esa ocasión, Richards profundizó en detalles de la fase compositiva y deslizó que se iban a tomar su tiempo para sacar a la luz algo nuevo: “Es un desafío interesante. No tiene sentido darle a Mick una canción que esté más allá de su alcance o con la que no se sienta cómodo. Lo que realmente me gusta hacer es escribir una canción donde Mick diga: ‘Sí, adelante’. Eso es lo que trato de hacer, porque estoy escribiendo para el cantante principal de los Rolling Stones, y ese es mi trabajo, darle un riff genial”.
En enero de 2019, fue Ronnie Wood quien sumó información y, a su vez, explicó la dilación del lanzamiento: “Mick y Keith quieren asegurarse de que las canciones sean realmente buenas”. Más tarde, a fin de ese año, el ex Faces agregó: “El nuevo álbum es como un puzzle. Todavía debemos juntar las piezas”. Pero inmediatamente después, trazó un horizonte más concreto: “Esperamos lanzarlo en 2020 y después continuar en un tour mundial”. Pero la pandemia retrasó esa posibilidad.
Los Stones y el covid
Ya en medio del confinamiento por el Coivid-19, el foco de atención mundial se posó en la salud. Sin embargo, la música fue uno de los cables a tierra de las personas aisladas del mundo exterior. Y los Stones no dejaron solos a sus fans: en menos de una semana, participaron, primero, de un evento virtual de la Organización Mundial de la Salud para recaudar fondos en el marco de la emergencia sanitaria, y lanzaron, después, el sencillo “Living in a Ghost Town”.
Ese año, Jagger sumó su voz para contar en que estaba el proceso creativo: “No sé cuándo volveremos a reunirnos en este momento. No sabemos cuándo podremos estar juntos y grabar. Debe ser bajo circunstancias seguras. Pero estoy seguro de que podremos reunirnos pronto. Debemos terminar las cosas que ya hemos hecho. Suena genial, es muy variado, con varios tipos de música distintos”.
En 2022, los indicios de que finalmente venía algo nuevo fueron mucho más concretos. Primero fue Richards, quien aseguró que Charlie Watts estaría en el disco: “Hizo algunas cosas con Mick y ya tenemos bastante material con Charlie. Él no tenía en mente grabar porque no iba a estar aquí. No era ese tipo de persona y no pensaba así. Estábamos a mitad de camino de hacer un álbum cuando murió, maldita sea… yo amaba a ese hombre». Pero luego de lamentar la ausencia de su amigo, adelantó: “Todavía no han escuchado lo último de Charlie Watts”.
Más tarde, en noviembre, llegó la confirmación por parte de Wood, que aseguró: «Estamos grabando el nuevo álbum ahora y nos vamos a Los Ángeles en unas semanas para llevarlo a cabo y terminarlo».
Y hubo que esperar hasta agosto de este año para que los indicios se transformaran en realidad. En el marco de una masterclass de marketing, los Stones y Universal Music, la discográfica que tiene los derechos del catálogo de la banda, fueron copando los diferentes medios de comunicación y hasta la vía pública en diferentes partes del mundo (incluso en Buenos Aires con afiches con la frase “Don’t Get Angry With Me”, como grita Jagger en el primer corte de difusión de Hackney Diamonds) con adelantos, deadlines, fragmentos de canciones, fotos, entrevistas, sencillos y videoclips.
La primera confirmación oficial apareció en forma de publicidad de un local ficticio, ubicado en el municipio londinense de Hackney, en el que se dedican a reparar vidrios. La frase de cabecera, decía: “Nuestro amable equipo te promete satisfacción. Cuando digas dame refugio, te arreglaremos las ventanas destrozadas”.
Desde ese instante, la ansiedad creció exponencialmente. Pero la espera terminó. Ladies and Gentlemen: Hackney Diamonds de los Rolling Stones.