La Federación de Asociaciones de Profesionales de la lndustria Audiovisual Argentina anunció que no participará en la edición 2024 del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, que comienza el 21 de noviembre, por diferencias con los organizadores y las políticas de las nuevas autoridades del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA).
La entidad, que integran EDA y SAE (editores), ASA (sonidistas), AADA (directores de arte) y ADF (directores de fotografía), emitió un comunicado en el que señala: «Hemos decidido no participar en la próxima edición del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata con la tradicional entrega de los premios no oficiales”
“Esta decisión responde, en principio, a la falta de garantías necesarias para que los jurados de nuestras asociaciones puedan desempeñar su labor de manera respetuosa con las películas participantes, con nuestras instituciones y con el festival en sí”, añadieron.
“La forma en que la conducción actual del Festival decidió manejar la organización, suspendiendo la comunicación con las asociaciones profesionales, expresa la falta de interés en buscar acuerdos comunes que hagan posible nuestra participación y respeten la tradición de nuestros premios”.
En otra parte del comunicado expresan su preocupación por la crítica situación que enfrenta el cine argentino, “afectado por la ausencia de políticas de fomento que acompañen las necesidades reales de nuestra industria. Nuestras producciones y nuestras fuentes de trabajo están ya no en peligro, sino bajo ataque”.
A fines de septiembre se conocieron las primeras películas que participarán en la 39 edición del Festival de Mar del Plata. El nuevo codirector Jorge Stamadianos informó que el evento comenzará con Emilia Pérez, de Jacques Audiard, la película que Francia envió a los Oscar. También se supo que el país invitado será Japón y se confirmó la visita de la directora Milwa Nishikawa para presentar una retrospectiva. Además, habrá un ciclo dedicado al director armenio Sergei Parajanov.
El festival anunció tambiénb la proyección de títulos emblemáticos que pasaron por Mar del Plata y después tuvieron una importante trayectoria como El jefe (1958), de Fernando Ayala; Los venerables todos (1963), con la que además se homenajeará al recientemente fallecido Manuel Antín; Buenos Aires viceversa (1996), de Alejandro Agresti; Pizza, birra y faso (1997), de Israel Adrián Caetano y Bruno Stagnaro; y El abrazo partido, de Daniel Burman (2004).
Además, se rendirá homenaje a importantes películas argentinas que cumplen 50 años como La tregua, de Sergio Renán, se estrenará una copia restaurada de La patagonia rebelde, de Héctor Olivera, y se podrá ver nuevamente Boquitas pintadas, de Leopoldo Torre Nilsson, de cuyo nacimiento se celebran 100 años. Habrá un ciclo de homenaje al legendario director, en el que también se verá la película de su hijo, Pablo Torre, el documental Mi padre y yo.
Muchos productores, directores y actores argentinos rechazaron invitaciones para participar en el festival a modo de protesta por el desfinanciamiento del sector. Y en cambio están organizando una especie de evento paralelo no oficial, que se realizará del 21 al 24 de noviembre. Se proyectarán allí varias de las mejores películas argentinas del año y se realizarán actividades de protesta contra la política del Gobierno en materia cultural.