Llevando su repertorio desde el presente al pasado y viceversa, Guillermo Piccolini (parte vital de proyectos como Los Toreros Muertos, Pachuco Cadáver y Venus) decidió publicar un álbum que exhibe en vivo mucho de su trabajo más sensible y celebrado. Se trata de Café Berlín (en vivo), un material tan rico como intimista que ofrece la instancia de escucharlo sin los artilugios de un estudio, y siempre entonando grandes pasajes que llevan su firma.
El álbum fue grabado en ocasión de la presentación formal de Futuro imperfecto (primer disco solista del ex Toreros Muertos, lanzado en 2021) que contó con la colaboración de Tito Losavio (guitarras), Martin Aloé (bajo) y Martín Millán (batería) y que para la ocasión sumó la colaboración Colo Belmonte, El Soldado y un notable trío de cuerdas liderado por Federico Terranova. Como álbum, Café Berlín ya puede escucharse en las redes sociales de Piccolini, así como también en plataformas musicales.
Videos y disco
“Es un disco que me tiene encantado, casi como las dudas que tenía de lanzarlo. Estas canciones se grabaron con la intención de rescatar dos o tres videos para publicar en YouTube, y sin muchas más aspiraciones. Pero cuando escuchamos lo grabado nos pareció que estaba muy bueno. Entonces me propusieron sacar un álbum con todo eso, algo que me pareció extrañísimo porque yo me preguntaba cómo podría sacar un disco en vivo si solamente tengo un sólo trabajo de estudio como solista. Era algo a lo que no le encontraba sentido, esa es la verdad. Pero en el repertorio mío hay otras canciones como ‘Mi agüita amarilla’, de Los Toreros Muertos, y temas de Pachuco Cadáver y Venus, así que en este disco quedaron dos de Venus y ese hit de Toreros. Finalmente quedé muy feliz con el resultado final, incluso contrariando mis propias suspicacias (risas).”
La banda que acompaña a Piccolini en Café Berlín tiene una historia de larga data: “Somos grandes amigos, de años con Losavio, Aloé y todo el resto de los chicos. Lo que también hay que entender es que la música es el arte de combinar los horarios. Pero todos me dijeron que estarían a disposición de inmediato, algo que me hace sentir como un tipo con suerte. Si bien no soy un músico popular, por alguna razón al gremio le caigo bien, me quieren, así que cuando le propongo a un músico alguna colaboración suelo tener suerte y obtener una respuesta positiva. Eso fue muy importante para hacer un disco de estas características.”
Por múltiples razones, un álbum como este puede actuar como una carta de presentación amplia para quienes no conozcan el camino que Piccolini viene construyendo desde los ’80: “Sí, puede funcionar de esa manera. Todos los temas encajan entre sí, algo que es curioso. Temas como ‘Mi agüita amarilla’, ‘Poeta’ o ‘Abejitas’, no desentonan entre sí, teniendo en cuenta que son canciones de épocas y proyectos disímiles. Este disco ofrece un clima especial, las canciones van creando un ambiente que te envuelve al escucharlo. Creo que eso fue lo que me dejó más satisfecho.»
El humor es una de las facetas sobresalientes del músico, pero no está tan presente en el concepto global de Café Berlín. ¿Estamos entonces hablando de un disco maduro del ex Toreros Muertos? “Sí, aunque mi anterior disco venía también por ese lado”, dice antes de meterse de lleno en una explicación. “Hay cosas, juegos de palabras que se mantienen, pero fundamentalmente son canciones con las que intento conmover o tocar sentimientos del oyente. El humor acá es distinto, porque cuando se hace música de ese tipo tocar ciertos sentimientos es más difícil, sobre todo porque la gente está en otro ánimo, espera otra cosa. Es verdad, no hay mucho humor, pero todo es también más sincero y directo que antes”, concluye Piccolini.
Guillermo Piccolini
Café Berlín (En vivo)
1. «Abejitas»
2 «Don distante».
3 «Día tras día.»
4. «Sueño de libertad».
5. «Poeta».
6. «Vení a buscarme».
7. «Mi agüita amarilla».
8. «No voy a ir».
9. «Juan dice».
10. «Blues».