Debajo del ropaje y la máscara de Fantastic Negrito, el electrizante artista que le imprimió un pulso personalísimo a la música afroamericana, se encuentra Xavier Amin Dphrepaulezz, pero se trata solo de una cuestión nominal: no existen diferencias entre el andar del hombre público y su sentir e historia personal.
Es que el músico, que el próximo 26 de octubre se presentará en el Teatro Vorterix, no solo estremece y logra una conexión sinigual con su audiencia a través de sus canciones, sino que además es un filántropo que día a día pone en práctica todo aquello que aprendió y pregona.
Mucho se ha comentado sobre la resiliencia de este residente de Oakland, California, criado en una numerosa familia bajo las estrictas normas de una dura educación musulmana, que se liberó de su hogar a los 12 años para vivir en la calle, sobrevivió vendiendo crack, encontró consuelo en la música, tuvo un accidente de tránsito que casi le cuesta la vida, fue abandonado por la industria, dejó de tocar porque sintió que “no tenía nada para decir” y regresó con gloria en 2015 reconvertido en Fantastic Negrito.
Desde entonces, entre otras cosas, el artista puso en marcha Revolution Plantation, un proyecto de granja urbana cooperativa que da trabajo a chicos de la calle, regentea su propio sello musical y aboga por la abolición definitiva de las diferencias étnicas, una labor para la que se sumerge en sus propias raíces y las expone a modo de aprendizaje en sus obras.
“Si hacés música y vas alrededor del mundo con tu música, tenés que conectar con la gente, eso es lo más importante en un ser humano, conectar. Adónde sea que vaya, doy todo lo que tengo porque es muy importante para mí. Soy muy afortunado de ser un artista, no puedo imaginar mi vida de ninguna otra manera. Y como me siento afortunado por eso, quiero darlo todo cuando actúo”, expresa Fantastic Negrito en comunicación telefónica con Tiempo, poco antes de su tercera visita a nuestro país.
Esta filosofía pareciera haber dado sus frutos en el caso del público local, que de inmediato se enamoró de este exponente de la música afroamericana cuando lo conoció en 2019, y revalidó su fascinación en 2022. El flechazo fue mutuo, de acuerdo a lo que él mismo manifiesta.
“El espíritu de la gente de la Argentina no se ve en ninguna parte del mundo. La energía no se compara con la de ningún otro lugar del mundo. La gente de la Argentina sabe cómo ser feliz, sabe cómo celebrar. Esa es mi clase de gente y pienso que es por eso que siempre me va bien allí”, reflexiona.
-¿Habrá alguna diferencia entre los shows anteriores en Argentina y este que estarás presentando el próximo 26 de octubre en Vorterix?
-Cada vez que fui cambié de banda, así que esta es una banda diferente. En primer lugar, tengo un bajista. Yo nunca toqué en la Argentina con un bajista, siempre toqué con un tecladista que hacía los bajos. Ahora tengo un bajista increíble que tocó con todo el mundo, desde gente como CeeLo Green hasta Whitesnake. También tengo un nuevo guitarrista, un joven de 25 años que su madre fue la peluquera de Prince, así que es un joven que desde muy chico creció en medio de esa energía. Es una banda diferente, creo que más al límite, más cruda, pero todavía dentro de una línea funky. La gente puede esperar que tendrá la música de sus vidas: rock, funk, soul, blues, rhythm y hasta algunos lujos.
-Acabás de lanzar un nuevo single, “Undefeated Eyes”, junto a Sting. ¿Qué podés comentar al respecto?
-Lo grabamos hace un tiempo largo, antes de la pandemia. Si me preguntás por qué no lo publiqué antes, realmente no lo sé. Me di cuenta que nunca había escrito una canción sobre las relaciones y el amor entre un padre y un hijo, la infidelidad entre un hombre y una mujer. Ahora que tengo un nuevo disco que se llama Son of a Broken Man, en donde hay mucho sobre la lucha entre el padre y su hijo, el amor, la confianza y la traición, finalmente decidí dar a conocer este single con Sting. Es una gran cosa ser independiente, tener tu propio sello, autoproducirte, autofinanciarte, porque tenés el control de sacar tu música cuando sentís que es el momento correcto.
-¿Qué perspectivas tenés frente a las elecciones presidenciales que se celebrarán en Estados Unidos en noviembre que enfrentarán a una mujer de raíces negras contra un exponente de la supremacía blanca?
-Yo pienso que el racismo es una construcción, una invención, una ilusión, y cuando la gente pone el foco en eso como una maldición no hay mucho por hacer. Creo que en el fondo es un problema de poder: si tenés dinero, no importa de qué color sos, esa gente te amará. Para estas elecciones hay que elegir entre dos candidatos. Uno de ellos, en mi opinión personal, es realmente horrible, hablo de Donald Trump. Del otro lado, tenemos a una mujer de color (Kamala Harris) pero que representa el mismo tipo de corporativismo, o sea, mantener a los ricos, ricos, y a los pobres, pobres. Esas son las opciones. No es grandioso, pero optaré por la persona que no predica el odio y no crea divisiones entre la gente. Las dos personas van a hacer el mismo negocio de siempre, por eso no estoy entusiasmado, pero Trump es más peligroso. Cualquier cosa que diga o haga es particularmente desagradable. Pero insisto, tampoco me entusiasma la persona que está del otro lado. Creo que es un problema más global que el color de la gente.
-¿Por qué elegís autodefinirte como un “narcisista reformado”, según expresaste en varias entrevistas?
-Parte de mi narcisismo fue porque vendía crack cuando tenía 12 años, pero nunca usé drogas. Mis padres me abandonaron básicamente, entonces vivía en la calle y tenía que ganarme la vida. Estaba asustado de que el día de mañana se me viera afectado psicológicamente, así que me convertí en un narcisista. Ahora me autodefino así para poder trabajar sobre ello. Pienso que todo el mundo, todas las cosas, buenas o malas, son mis maestros. Me describo así para alejarme de esa sobrevaloración que tienen los estadounidenses, que es un gran problema. Eso de decir “somos grandiosos, somos los número uno”. Tu drama es tu oro. Las cosas que te pasan tal vez san las cosas que más te ayuden.
-¿Existe alguna relación entre tu proyecto Revolution Plantation y el mensaje que intentás dar con tus canciones?
-¡Sí! Absolutamente. Creo que las plantas son las grandes maestras. Si tenés una planta y le das buena luz, amor, buen espacio, agua y nutrientes, esa planta producirá tu sustento, comida, e incluso dinero, o cualquier cosa que necesites. Es como las personas. Si a una persona le das un buen lugar, buena comida, buena luz, producirá para vos. Amo esta correlación entre las plantas y la gente, y la música y sus mensajes. Hay una profunda conexión. En nuestras granjas practicamos el reciclaje, tomamos las cosas que se ven mal y las convertimos en algo bueno, le damos una buena razón para convertirlo en algo bueno.
Fantastic Negrito en vivo
Sábado 26 de octubre en Teatro Vorterix, Federico Lacroze 3455.
Xavier Dphrepaulezz (voz), Brian Simmons (teclados), Clark Sims Gaines (guitarra), Uriah Duffy (bajo) y Damon Taylor (batería).