Promediaban las 14 horas de este miércoles, horario y día que, en el marco del Aislamiento Social Obligatorio, no podrían ser más anodinos. Sin embargo, ese fue el momento elegido por Ca7riel, uno de los máximos exponentes de la música urbana actual, para realizar una publicación en su perfil de Instagram que generó un inmediato trendingtopic: un video de casi dos minutos en el cual “comparte” un porro en una ronda, integrada por otros personajes públicos, la mayoría de ellos, jóvenes. Son de la partida varias estrellas del género (Wos, Chita, Paco Amoroso, Dakillah, y Duki, entre otros) y diversos exponentes en el ambiente artístico y mediático (desde la diseñadora La Coneja China hasta el actor Esteban Lamothe, solo por nombrar algunos).
Al momento de la redacción de esta nota, el video acumulaba más de 330.000 “me gusta” y cerca de 10.000 comentarios. Instantaneidad y masividad son dos palabras clave para comprender la dinámica de las redes, pero no son suficientes para explicar, en este caso, la relevancia de este material. Hay muchas aristas a partir de las cuales podemos acercarnos, pero sin dudas la principal es que su autor, Catriel Guerreiro (ese es el nombre que figura en su DNI), es un artista brillante.
El video está situado en “El futuro” como lugar, como una geografía a la que apunta estando en este presente. Para Ca7riel el futuro no es un momento, es un espacio que habitar produciendo, comunicando, generando. El porro pasa virtualmente de manos mientras suena “We are the world”, canción interpretada en 1985 por un conjunto de músicos mainstream autodenominados USA for Africa, con el objetivo de recaudar fondos que posteriormente fueron donados para paliar emergencias humanitarias en dicho continente. En tiempos en que es necesario el fortalecimiento de la solidaridad social como herramienta de lucha colectiva, Ca7riel rememora esa experiencia que representa lo peor de la caridad, una acción aislada que intenta expiar las culpas de los principales beneficiados por la faceta más salvaje del capitalismo. Riéndose del pasado con forma de consumo irónico, el músico se ubica en el futuro mostrando el presente.
¿Y cómo es esa actualidad? Honesta, simple y entre amigos que comparten. Frente a los numerosos casos de empresarios multimillonarios que violan la cuarentena de forma sistemática, estos jóvenes se muestran en sus casas, separados físicamente, pero unidos por la virtualidad, el sentido del humor, la producción de contenidos para que sus públicos puedan acceder libremente mientras dure el confinamiento y la voluntad de visibilizar el consumo personal de marihuana como una práctica pacífica, recreativa y hogareña. Su rebeldía es la creatividad, la ironía inteligente y la interpelación de jóvenes que, sin dudas, luego de ver este material estarán aún más comprometidos con respetar la cuarentena porque el futuro es un espacio y un momento que, así, valdrá la pena ser habitado.