Ante versiones periodísticas sobre la intención del Gobierno Nacional de eliminar el impuesto del 10% de las entradas de cine en una futura reforma tributaria, la preocupación se extiende a la Academia Argentina de Artes y Ciencias Cinematográficas, la Cámara Argentina de la Industria Cinematográfica (Caic), la Asociación de Directores Proyecto Cine Independiente (PCI), la Asociación de Productores de la Cultura Audiovisual y a la Unión de la Industria Cinematográfica. A ellos los acompañan la Asociación General de Productores, la Unión de la Industria Cinematográfica, la Asociación de Productores Audiovisuales de Córdoba, la Cámara de Empresas Productoras de la Industria Audiovisual de Rosario y la Cámara Argentina de Distribuidores Independientes cinematográficos. A esas asociaciones se añade la de Productores Independientes de Medios Audiovisuales (Apima), que manifestaron su preocupación y convocaron «a todos los sectores a mantener un estado de alerta permanente para movilizarse en defensa de nuestro cine y de las miles de fuentes de trabajo que genera», según señalaron en un comunicado, ante la futura reforma tributaria que planifica el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
En la nota, los productores nucleados en Apima expresaron su preocupación «ante la nota periodística publicada el pasado sábado 4 de febrero en el diario La Nación, en donde expresamente se hace mención a la eliminación del impuesto del 10 por ciento en las entradas de cine en una futura reforma tributaria». Según explicaron, «el impuesto del 10% a las entradas de cine contenido en la Ley 17.741 es parte esencial de la constitución del Fondo de Fomento Cinematográfico que administra el Incaa. Es un impuesto que sólo pagan los espectadores de cine y que vuelve al cine con el fin de hacer más cine».
«Su eliminación es un atentado al cine argentino, al Incaa, a los productores, directores, actores, técnicos, autores y prestadores de servicios que verían disminuido su trabajo y a toda la sociedad argentina orgullosa de su cine donde se ve reflejada y representada en los más prestigiosos festivales y mercados internacionales», añadieron.
En tanto, las demás asociaciones indicaron en un comunicado conjunto (del cual no participó Apima) que «el cine argentino está viviendo un momento de gran madurez y genera admiración en los cinco continentes. Es por eso que leemos con inquietud y preocupación las versiones periodísticas como la publicada en La Nación el sábado 4 de febrero».
»Ese artículo consigna el análisis de un grupo asesor del Ministerio de Economía que sugiere eliminar el gravamen del 10% en las entradas de cine con el que se contribuye a la producción local. Quizás quien no pertenece al sector desconoce que el cine argentino utiliza fondos generados por el propio sector audiovisual sin intervención de impuestos generales. Es decir, una estructura que se sostiene a sí misma».
«La eventual eliminación de este gravamen tendría un impacto negativo enorme en el sector sin compensación alguna en los fondos públicos ni el bolsillo de los contribuyentes. Como representantes de una industria que trabaja todos los días para que Argentina tenga reconocimiento internacional, queremos expresar nuestro inmediato rechazo a cualquier medida como la mencionada», resumieron.