En el laboratorio de escritura de Ariel Farace, allá por 2018, Jimena Aguilar comenzó la elaboración de un texto que habla tiernamente de cómo vivimos el pasado y el futuro. Lo hizo con figuras de antihéroes como protagonistas, quienes con humor desarman sus propias tristezas en un periplo que se proponen cumplir. Se trataba de una mirada filosófica de la existencia, algo que siempre vuelve interesante a los materiales a interpretar.
Pasó el tiempo, el trabajo fue terminado, la obra fue editada por Libros Drama y terminó siendo la ganadora del III Premio Internacional Dramaturgia Invasora 2019, en España, donde se destacó por cómo aborda de manera singular temas como la amistad y el abandono. Llegó la pandemia y el estreno se retrasó: pero por fin subió al escenario de Espacio Callejón.
“Trabajamos fuerte en los ensayos durante diciembre y enero. El hecho de haber atravesado la pandemia nos hizo darnos cuenta que debíamos presentarla de una manera atractiva y diferente, por eso hay músicos en vivo y alguien que hace proyecciones, que acompañan a los cuatro actores en escena. El teatro por streaming o grabado nos dio la idea para complementar lo teatral con algo más que lo tradicional. Es como que intentamos que haya un aprendizaje de este tiempo que no había presencialidad”, cuenta la creadora.
Aguilar reconoce que es una obra que reflexiona sobre la pérdida y el proceso que se realiza luego de este tipo de vivencias. “Sin duda toda experiencia vital nos modifica y hay procesos que dan diferentes tipos de duelos o de digerir situaciones dolorosas. En la obra se hace con humor, recordando, imaginando, soñando. Se muestran diferentes aristas que tienen los viajes internos que en este caso es una metafórica excursión al centro de la Tierra”, destaca.
“Tenemos que descubrirnos y esta obra intenta hablar de eso. Las metáforas e imágenes que incluí son abiertas y cada espectador va a poder ir para donde su cabeza lo lleve. La presencia de la coyuntura no era un objetivo, pero luego de estos dos años, seguro alguien le puede hacer reflexionar sobre la situación actual de la humanidad”.
La dramaturga, directora y música (toca el piano, también en esta obra) actualmente se encuentra cursando la carrera de Dirección Escénica de Ópera en el Instituto Superior de Arte del Teatro Colón. “Siempre tengo en mente el diseño sonoro de la obra, pero creo que la carrera y todo lo que tiene que ver con la ópera es un marco teórico donde apoyarte. De qué manera unir lo musical, visual y teatral en la escena. Es un género muy rico en estímulos y lo que aprendo trato de ponerlo en mis obras, sin que sean óperas, sino ficciones, pero teniendo en cuenta muchos aspectos que también comunican desde el escenario.”
Es una pieza que tiene una puesta con tres texturas definidas (una para los recuerdos, otra para lo que imaginan los personajes y otra para la acción real y concreta) que se entremezclan. “Traté que fluyan, para que el juego y las ideas que plantea la historia sean amenas y atractivas. Son tiempos donde el teatro tiene que competir con otros tipos de estímulos y opciones que a veces pueden hacer que el público prefiera quedarse en casa. Por suerte el interés por el encuentro teatral se mantuvo y los que amamos esto seguimos luchando para mantenerlo vivo”.
Que el texto haya ganado un premio en España fue obviamente una alegría profesional “pero siendo de familia descendiente de españoles , me pareció que era una de esas vueltas que de la vida, un giro que cruza continentes y generaciones, ya que mi abuelo también escribía historias y recibir reconocimiento en la tierra de sus padres es un honor”.
Una circunstancia denominada mundo
Obra escrita y dirigida por Jimena Aguilar ganadora del III Premio Internacional Dramaturgia Invasora 2019, en España. Lunes de febrero, a las 21, en Espacio Callejón, Humahuaca 3759.