Llegamos. Ya está. Finalmente, el lunes se publicó en Boletín Oficial lo que tanto soñamos: SiPreBA tiene personería gremial. Hubo muchísimo trabajo y militancia de muchos compañeros y compañeras a lo largo de los años.
Algunos que ya no están, otros que fueron expulsados de la actividad por la precarización pero todos parte de esta conquista colectiva. El sindicato nació el 7 de junio de 2015 tras un plebiscito masivo. No elegimos crear un sindicato «paralelo», tuvimos que refundar EL sindicato de prensa que nuclee a todos los trabajadores y trabajadoras de la actividad, indistintamente de su simpatía política o de su sector laboral en medios privados, públicos, autogestivos.
El sindicato nació de las propias redacciones, de sus asambleas y de sus comisiones internas, que habían resistido pese al abandono y las entregas reiteradas de la UTPBA. Por eso SiPreBA inmediatamente contó con la legitimidad total en los medios, protagonizando peleas, dando debates profesionales, garantizando cuestiones sociales, desde viviendas hasta kits escolares. Nunca sin dificultades, ni sin errores ni problemas.
Otorgar la personería gremial a un sindicato y sacársela a otro no es una decisión que una ministra pueda tomar de un día para el otro arbitrariamente. Fue un proceso largo y minucioso donde tuvimos que demostrar cada afiliación, tal como exige la ley de asociaciones sindicales. Pero para que eso sea posible, además de toda la construcción gremial también necesitábamos de la voluntad política del gobierno, en particular de la ministra de trabajo Kelly Olmos y la gestión de su equipo. Tampoco hubiese sido posible sin el apoyo de FATPREN y los sindicatos de prensa de todo el país, de la CGT, las CTA y el movimiento obrero, así como muchos sectores que siempre fueron solidarios.
Llegamos pero esto recién empieza. Tenemos una tarea enorme: recomponer los salarios, pelear contra la precarización laboral, defender los convenios y el Estatuto del Periodista, regular nuevas tecnologías y funciones de una actividad en constante transformación, pensar en las nuevas formas de hacer comunicación y en qué comunicación queremos, frente a tanta concentración mediática, operaciones y degradación de nuestro oficio, que también se precarizó. Sabemos que, como hasta ahora, no estaremos solos. A su vez, esperamos poder construir un canal de diálogo fructífero con las cámaras del sector y cada empresa porque de todos depende revertir esta dramática situación.
Allá vamos, con un compromiso enorme y con las puertas abiertas de par en par de nuestro sindicato para todos los trabajadores y trabajadoras de prensa que quieran participar, que encontrarán en el SiPreBA un puesto de lucha. «