La Unión de Empleados Judiciales de la Nación, encabezada por Julio Piumato, ya tenía pautada una movilización para el 30 de abril luego del paro sectorial que tienen fijado para el viernes 26.
El propósito de ambas medidas es el de ejercer presión en favor de un aumento del 15% en los salarios como primera cuota de la actualización para el año 2019. No se trata de una negociación paritaria puesto que, en el sector de los judiciales, los aumentos surgen por resoluciones administrativas de la Corte.
A raíz del paro convocado para el 30 de abril por el Frente Sindical para el Modelo Nacional (que incluye unos 80 sindicatos y 70 regionales de la CGT) y las tres vertientes de la CTA, “que imposibilitarán los traslados desde el interior del país y también en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”, el Consejo Directivo de la UEJN resolvió un “cambio de modalidad” de la acción que implica la suspensión de la movilización y su transformación en un paro nacional.
Si bien no se trata de una adhesión explícita a la huelga dispuesta para ese día por el FreSiMoNa, en los hechos, se trata del primer sindicato cuyo dirigente integra el Consejo Directivo de la CGT que parará el 30 de abril reforzando una medida que fue adoptada a espaldas del mismo y en franco desafío al binomio de Héctor Daer y Carlos Acuña.
El carácter elíptico de la resolución no puede ocultar que Piumato ingresó al Consejo Directivo de la CGT como parte de los dirigentes enrolados dentro del sector liderado por Hugo Moyano aunque fue uno de los dirigentes de ese bloque que desistió de retirarse de la conducción cuando así lo hicieron Pablo Moyano, Facundo Moyano, Omar Plaini y Juan Pablo Brey, entre otros. Otros que provenientes de ese agrupamiento eligieron continuar en la conducción fueron los dirigentes del Seguro Jorge Sola y el panadero Abel Frutos.
Piumato había desistido de dar un paso al costado de la mano del denominado 21F por la identificación de ese espacio político y sindical con la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner que no acompaña.
Desde el Consejo Directivo de la CGT desestimaron a Tiempo la adhesión del dirigente judicial a la medida del FreSiMoNa y aclararon que “es un paro por un tema de la paritaria sectorial”. Al mismo tiempo reconocieron que no habrá reunión del Consejo Directivo de la CGT antes del 30A que pudiera darle una cobertura legal aunque desestimaron la posibilidad de que el gobierno fuera a dictar conciliaciones obligatorias por sector con el propósito de desarticularla.