Finalizó el congelamiento de combustibles que el Gobierno había dispuesto por 90 días tras la última devaluación del peso. Desde este jueves el precio de en los surtidores Tendrá un  incremento del 5% en naftas y gasoil y podría sumar otro 5% en diciembre, afirman desde el sector.

Con este incremento, el litro de nafta súper en los surtidores de YPF pasó de $47,79 a $50,19 y el litro de nafta premium pasó de $55,14 a $57,94. A su vez, el diesel común se incrementó de $44,74 a $46,99 y el diesel premium, de $52,34 a $54,99.

En el caso de la empresa Raízen, propietaria de las estaciones Shell, los nuevos precios en las estaciones de la ciudad de Buenos Aires son de $50,64 para el litro de nafta super; $58,56 para el litro de nafta premium; $49,34 para el diesel común y $55,98 para el diesel premium.

Mientras que en la red de estaciones Axion, los precios de referencia son de $50,29 por litro para la nafta super; $58,34 para la nafta premium; $48,28 para el diesel común y $55,85 para el diesel premium.

El aumento previsto se suma a los aumentos de los costos de mantenimiento de un vehículo, que en el último año crecieron un 61% promedio.

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Gabriel Bornorini, presidente de la Confederación de Hidrocarburos, advirtió que “termina el congelamiento de los precios de la nafta el jueves puede haber aumento del 5%”, el pasado martes. El incremento fue confirmado por la entidad en naftas y el diesel, se estima que no será el único se  espera un nuevo incremento para  el 1 de diciembre próximo. 

En declaraciones radiales, el empresario contó: “El combustible le falta una actualización del 15%, es lo que dicen las petroleras. Nosotros expendemos y no remarcamos los precios. Las petroleras vienen negociando con el gobierno aumentos escalonados de los precios”.

En ese sentido, recordó que “durante el congelamiento, las naftas aumentaron un 10% y ahora se viene un 5% más” y que “con el fin del congelamiento el precio de la nafta va a estar desregulado y va a ser libre, pero las petroleras ya aumentaron y no deberían aumentar más del 6%”.

De este modo este 14 de noviembre termina el plazo de 90 días dispuesto en el decreto 601 que fijó un precio del dólar y por ende del barril de petróleo inferior al de mercado para evitar un mayor traslado a precios de la devaluación en plena campaña electoral. La norma fue muy criticada por el sector y el Gobierno apuntó a incrementos en tramos: primero un 4% en septiembre y luego otro 5% el 1 de noviembre.

Para las empresas, los precios en surtidor están atrasados entre 15% y 20%, teniendo en cuenta un tipo de cambio de $65, un Brent (precio internacional del petróleo) en torno a US$60 por barril.

A esto se suma que tras la derrota en manos de Alberto Fernández, Macri publicó el decreto 753 en el que decidió adelantar la aplicación del impuesto a los combustibles líquidos que había postergado desde mayo. 

Sobre el futuro del sector, Bornoroni aseveró que «las petroleras deberían esperar al nuevo gobierno con las nuevas políticas energéticas” y que “el congelamiento es positivo, pero el congelamiento parcial como el que tuvimos tuvo consecuencias negativa».