Un informe del Indec concluyó que en marzo pasado la industria trabajó al nivel más alto de los últimos años para este período. De acuerdo al relevamiento, el sector manufacturero utilizó el 67,1% de su capacidad instalada, el valor más elevado para ese mes desde que se elabora ese indicador, a comienzos de 2016.

Los rubros de Industrias metálicas básicas, Papel y cartón, Productos y minerales no metálicos y Sustancias y productos químicos fueron los que más colaboraron a mantener en alto ese índice: en todos ellos la producción superó el 75% del potencial máximo. Pero lo destacado fue que algunos rubros pegaron fuertes saltos con relación al año anterior y contribuyeron a elevar el índice general. Por caso, Papel y cartón usó 5,7% más que el mismo mes de 2021; en Sustancias y productos químicos el salto fue de 5,6%: mientras que en el sector de Edición e impresión fue de 6,9%.

Esos números hicieron que el índice general estuviera 2,6 puntos por encima del de 2021 y también 0,3 puntos por encima de 2018, que había sido el mejor registro de marzo de los últimos años. En marzo de 2020, con el comienzo de la pandemia de coronavirus, el uso de la capacidad productiva instalada había bajado al 51,6%.

El estudio, realizado en un universo de alrededor de 700 empresas, mide la proporción registrada en relación a la producción máxima que cada sector puede obtener con su actual equipamiento, teniendo en cuenta las paradas necesarias para mantenimiento y otras cuestiones técnicas. Se lo considera un factor que puede medir la fuerza de la demanda: se entiende que las empresas producen en la medida en que el mercado (sea el interno o el de exportación) requiere sus productos.

Esta recuperación en el uso de la capacidad instalada avala la teoría del gobierno de que la actividad económica creció con fuerza y que ya está en los niveles previos a la irrupción del coronavirus. «Esto es fruto de la continuidad del proceso de crecimiento industrial de la Argentina después de los cuatro años malísimos de la industria en el gobierno de (Mauricio) Macri y el inicio de la pandemia», dijo el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, al evaluar los datos del informe. «Automotriz, maquinaria agrícola, textil indumentaria y calzado son varios sectores donde se están viendo inversiones en capacidad productiva», detalló.

Aun así, las mejoras de la actividad manufacturera en su conjunto no logran evitar ciertas tensiones internas por la disponibilidad de insumos, en especial los importados. El ejemplo más claro es en el sector automotriz, donde las cámaras del sector enviaron una carta al presidente del Banco Central, Miguel Ángel Pesce, advirtiendo que las dificultades para acceder a divisas (en concreto, un tope en base a las cantidades compradas el año pasado) complicaban la adquisición de autopartes y otros elementos para la fabricación de los vehículos, “al no haber sido aceptados por parte de sus proveedores del exterior los cambios en las condiciones comerciales que tenían previamente”.

En relación a ese problema, Kulfas dijo que «hay una correcta administración de las divisas. Han habido algunos problemas puntuales respecto de la normativa del Banco Central que los estamos trabajando. Algunos fueron resueltos, otros se terminan de resolver en los próximos días. Había una cuestión con las autopartistas que también ha sido trabajada y la estamos terminando de resolver, así que en eso quiero llevar absoluta tranquilidad de que la industria va a tener las divisas que necesita para seguir creciendo», remarcó.